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Primer año: PlayStation 5 vs Xbox One Series S|X

COMPARACIÓN

Primer año: PlayStation 5 vs Xbox One Series S|X

Por Rodrigo Aliende

El 12 de Abril 2022 | 17:00

2021 ha sido el primer año de la nueva generación de consolas y ha sido un poco... extraño.

Noviembre de 2020. Ese fue el mes en el que tanto Microsoft como Sony decidieron lanzar sus consolas, prácticamente en el mismo día, un signo claro de la lucha entre ambos gigantes de la industria. Probablemente, los compradores de salida que ya tenían su consola reservada no se imaginaban lo afortunados que eran. Por otro lado, quizás algunos de ellos esperaban un catálogo más sólido para comenzar la generación por parte de ambas compañías. Poco más de un año después, vamos a parar un momento, dejar el mando sobre la mesa y ver cómo ha sido este año y qué nos depara en el futuro cercano.

Sin generaciones ni stock

Echando la vista atrás, los fabricantes de consolas siempre han intentado vender sus máquinas a través de su catálogo de exclusivos, ése era su principal reclamo para atraer a los jugadores (más allá de la potencia o de algún gimmick en el mando, por ejemplo). Tiene sentido, porque al fin y al cabo, compramos una consola nueva para poder jugar nuevos juegos que aprovechen sus nuevas especificaciones. Sin embargo, esto ha cambiado ligeramente con esta generación.

Xbox Series X

Microsoft, con Phil Spencer a la cabeza, dejó claro (y lo sigue haciendo) que su transición iba a ser más fluida de lo normal, ya que lo que buscan los de Redmond es crear un ecosistema en el que, da igual que juegues en una Xbox Series S o en un móvil a través de xCloud, lo que importa es que estés dentro -y pagando el Game Pass-. Por otro lado, en un intento de diferenciarse de la competencia, Jim Ryan, mandamás de PlayStation, aseguró que "nosotros creemos en generaciones". De esta forma, Sony quería dejar atrás PlayStation 4 (justificando así la falta de retrocompatibilidad) y pensar únicamente en PlayStation 5. Meses después, Sony no sólo sigue pensando en PS4, sino que ha aumentado su producción de la consola para compensar la falta de stock, mientras que Microsoft detuvo la producción de Xbox One a finales de 2020 para centrarse únicamente en Xbox Series S y X.

En efecto, los problemas de stock han sido el leitmotiv durante el pasado año y aún todavía hoy persiste, especialmente para PlayStation 5. Ahora mismo, encontrar una consola de última generación requiere o bien de muchísima suerte o bien seguir minuto a minuto grupos de Telegram donde avisan y tener mucha suerte también.

Lo peor es que esta sequía de chips no parece que se vaya a acabar pronto.En palabras del encargado de semiconductores de Toshiba, Takeshi Kamebuchi, "la oferta de chips va a seguir siendo muy ajustada hasta al menos septiembre del año que viene [2022]. En algunos casos, habrá algunos clientes que no podamos satisfacer del todo hasta 2023". El CEO de Intel, Pat Gelsinger, coincide en esta predicción y explica que la escasez se solucionaría a finales de 2021, pero "necesitamos uno o dos años para que la industria sea capaz de satisfacer la demanda".

PlayStation 5

Clara diferencia en ventas

Sony acabó la pasada generación con una posición dominante en cuanto a ventas y este primer año sigue manteniendo esta superioridad. En cuanto a cifras oficiales, Sony desveló el número de consolas distribuidas en septiembre de 2021: 13.4 millones de unidades. Sin embargo, Microsoft no ha hecho ningún anuncio sobre sus ventas hasta el momento, tan sólo Phil Spencer dijo recientemente que Xbox Series X y S estaban vendiendo mejor que sus predecesoras en el mismo periodo de tiempo.

Por lo tanto, si queremos realizar algún tipo de comparación entre ambas, debemos acudir a analistas expertos en la materia. El analista Daniel Ahmad, a raíz del informe de beneficios de Microsoft, estimó que había vendido más de ocho millones de unidades a finales de septiembre de 2021, con lo cual quedaría una diferencia de cinco millones. Desde Ampere Analysis son algo menos optimistas con las cifras de Microsoft, reduciéndolo a 6.8 millones, es decir, la mitad de las ventas con respecto a Sony.

Aun así, parece ser que las pasadas Navidades cerraron con una nota positiva para Xbox según apuntan ciertos expertos. A la hora de comprar regalos, el principal factor es que haya stock, y esto no está siendo un problema para Xbox Series S. Además, las características de la consola la convierten en una vía de entrada perfecta para el público menos especializado. Por último, las consolas Xbox recibieron dos bombazos para cerrar el año: 'Forza Horizon 5' y 'Halo Infinite'.

¿A qué hemos jugado este año?

Este primer año se ha caracterizado por tener muy pocos exclusivos, algo que obligue a los usuarios a dar el salto, algo completamente comprensible teniendo en cuenta la gran base de consolas PlayStation 4 que existe en la actualidad y la gran escasez que hay de PlayStation 5. En el catálogo de lanzamiento, únicamente encontramos 'Demon's Souls' e incluso esto se puede cuestionar porque se trata de un remake -uno muy bueno, todo sea dicho-. La expansión de Miles Morales fue un pequeño aliciente para los fans de Spider-Man, pero este contenido también estaba disponible en la pasada generación. Meses más tarde, llegaron un par de juegos exclusivos: 'Returnal' y 'Ratchet and Clank', que llegaron a tener una importante presencia en los Game Awards. Insomniac se ha convertido por derecho propio en la MVP de este primer año. Otra estrategia de Sony ha sido la de sacar versiones mejoradas con contenido exclusivo en PlayStation 5 de títulos bastante importantes: 'Ghost of Tsushima', 'Death Stranding' y 'Final Fantasy VII Remake'.

Game Pass como gamechanger, ¿y Sony?

Sin duda alguna, el Game Pass está siendo la característica sobre la que más se habla en esta generación. Microsoft está apostando todo a este servicio y su estrategia de adquisiciones está destinada a nutrirlo. Además de asegurarse exclusivos, los juegos multiplataforma aparecerán de forma gratuita el día uno mientras estemos pagando el Game Pass. Los últimos datos, ofrecidos en el anuncio de la adquisición de Activision-Blizzard, indican que el servicio estrella de Microsoft cuenta con más de 25 millones de usuarios (en enero de 2021, reportaron 18 millones).

Game Pass

Por ahora, la reacción de Sony en este aspecto está siendo nula, aunque hay informaciones que apuntan a que intentará hacer competencia con un servicio con nombre en clave Spartacus. Según apuntan las fuentes de Bloomberg, esto sería una fusión de PlayStation Plus y Now y se espera que se lance esta misma primavera. Este nuevo servicio contaría con tres niveles, que son los siguientes: el primero y más básico sería idéntico al Plus tal y como lo conocemos actualmente; el segundo ofrecería un catálogo mayor de juego de PlayStation 4 y PlayStation 5; la tercera y última incluiría demos extendidas, streaming de juegos y una biblioteca mayor de juegos clásicos de PS1, PS2, PS3 y PSP.

¿A qué hemos jugado este año?

Este primer año se ha caracterizado por tener muy pocos exclusivos, algo que obligue a los usuarios a dar el salto, algo completamente comprensible teniendo en cuenta la gran base de consolas PlayStation 4 que existe en la actualidad y la gran escasez que hay de PlayStation 5. En el catálogo de lanzamiento, únicamente encontramos e incluso esto se puede cuestionar porque se trata de un remake -uno muy bueno, todo sea dicho-. La expansión de Miles Morales fue un pequeño aliciente para los fans de Spider-Man, pero este contenido también estaba disponible en la pasada generación. Meses más tarde, llegaron un par de juegos exclusivos: 'Returnal' y 'Ratchet and Clank', que llegaron a tener una importante presencia en los Game Awards. Insomniac se ha convertido por derecho propio en la MVP de este primer año. Otra estrategia de Sony ha sido la de sacar versiones mejoradas con contenido exclusivo en PlayStation 5 de títulos bastante importantes: 'Ghost of Tsushima', 'Death Stranding' y 'Final Fantasy VII Remake'.

Ratchet and Clank: Rift Apart

Por su parte, Microsoft no tiene esa obligación de hacer exclusivos para su nueva consola, porque básicamente iría en contra de su estrategia de crear un ecosistema Xbox, sin importar en qué plataforma juegues. El catálogo de lanzamiento fue bastante pobre, principalmente debido al retraso de 'Halo Infinite', y Microsoft sacó su consola con muchos títulos multiplataformas y otros antiguos que se optimizan en la consola con 4K y 60fps. Sin embargo, en el último tramo del año, ha conseguido dar un golpe en la mesa y lanzar dos entregas de sus franquicias más importantes en menos de un mes: 'Forza Horizon 5' y 'Halo: Infinite'.

El futuro espera

Después de echar la vista atrás, es hora de mirar un poco al futuro tanto cercano como lejano. Sony sigue exprimiendo sus franquicias más importantes y acaba de lanzar una remasterización de 'Uncharted 4' y 'El Legado Perdido' en un mismo juego y a precio reducido, un lanzamiento menor destinado para los más fanáticos de Nathan Drake y los pocos que quedan todavía sin probar sus aventuras. 2022 es el año de las segundas partes para Sony. En febrero llega 'Horizon Forbidden West', la continuación de la intrigante historia de Aloy y los dinosaurios robóticos con la que Guerrilla Games sorprendió a propios y extraños hace cinco años. Aloy se ha convertido en un nuevo estandarte para Sony y esta secuela tiene el propósito de afianzar esa posición. El segundo pilar de este 2022 no podía ser otro que Kratos. Su cambio radical hizo que ganara el GOTY de su año. Este Ragnarok pondrá final a su epopeya en tierras nórdicas, aunque no son pocos los que se encuentran escépticos sobre su fecha de lanzamiento. Después de retrasarlo, Sony todavía no se ha atrevido a dar algo más concreto que un escueto 2022. A más largo plazo, los japoneses han querido dejar claro que siguen trabajando duro y presentaron dos teasers muy breves de 'Marvel's Spider-Man 2' y 'Marvel's Wolverine'.

Fable

En cuanto a Microsoft, es curioso que su juego probablemente más esperado no es uno ligado tradicionalmente a la marca Xbox, sino que proviene de Bethesda: 'Starfield'. La primera nueva IP de la compañía en más de una década está creando un gran revuelo entre los fans, aunque también hay algunos pesimistas que sospechan de un posible retraso que lleve al título hasta el año que viene. Por no hablar de 'The Elder Scrolls VI', del que todavía no sabemos absolutamente nada. La secuela de 'Hellblade' es otra de las apuestas de Microsoft conseguida a través de la adquisición de Ninja Theory. También son muchos los proyectos de los cuales apenas tenemos información: 'Everwild' de Rare (posiblemente para 2024), 'Gears of War 6' de The Coalition (un insider comentó que no lo veríamos hasta 2025-2026), 'Fable' de Playground Games, 'Perfect Dark' de The Initiative, 'Avowed' de Obsidian, 'Indiana Jones' de MachineGames. El futuro pinta muy bien para los de Redmond, pero 2022 quizás sea otro año más de transición. Microsoft necesita un tiempo para asentar sus últimas adquisiciones (la de Activision-Blizzard todavía ni siquiera está aprobada por las autoridades) y trazar un plan entre sus estudios para conseguir darle a su catálogo una personalidad clara para sus usuarios, tal y como ha hecho Sony.

Un año después...

Después de este extenso repaso del primer año de vida de esta carrera entre dos gigantes, podemos sacar algunas conclusiones. Sony lleva una clara ventaja en ventas, pero las generaciones dan muchas vueltas, tal y como vimos en el inicio de Xbox 360 y la remontada de PlayStation 3. Aunque Sony sigue manteniendo IPs exclusivas muy interesantes, Microsoft parece haber dado con la clave de esta generación: Game Pass. Además, el servicio será aún más potenciado en el futuro a medio-largo plazo gracias a las recientes adquisiciones de ZeniMax y Activision-Blizzard. Todavía queda mucho de carrera y Microsoft está demostrando estar actuando de forma muy poco miope y Phil Spencer se está ganando la confianza de muchos jugadores, mientras Sony se mantiene en lo alto, con la sensación de estar durmiendo en los laureles.

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