Se acerca poco a poco el mes de septiembre, la vuelta a la rutina en la que todo volverá a ser como siempre por las mañanas: que si el desayuno a medio hacer, corriendo para alcanzar el bus, el cuello de la camisa mal doblado... Lo normal, solo que esta vez ya no vas a ver a tanto gente con eBook en la mano como con un Smartphone jugando a 'Pokémon GO'. Lo vamos a ver con nuestros propios ojos, especialmente en las grandes ciudades.
El problema es que hay criaturas de la Pokédex que se están haciendo particularmente complicadas de alcanzar. Todos queremos tener un Alakazam, un Lapras, un Articuno y un Dragonite, y si son shinys mejor porque seremos los primeros en tener especies variocolor. Pero llegados a cierto nivel en el juego se hace harto sifícil evolucionar, capturar a según qué especies o meramente encontrarlas, así que os vamos a echar un cable.
¡Snorlax, te elijo a ti!
No es que tengamos una bola de cristal, pero investigando un poco hay usuarios que han encontrado la manera de facilitar la captura y encuentro de algunas especies. En esta entrega vamos a centrarnos en una criatura de 460 kilos y 2.1 metros llamada Snorlax. Quizá os suene de algo. Si es así, has de saber que para capturarlo puedes hacerlo desde Europa, afortunadamente, y llevar contigo unos cuantos huevos cuya eclosión se produzca a los 10 km, los más difíciles de criar. Las probabilidades de que sea Snorlax no son demasiado altas, eso sí.
La única manera conocida por el momento de capturar un Snorlax es mediante la eclosión de este tipo de huevos; sin embargo, hay un método que lo facilita todavía más como es la evolución de tres Pokémon en este periodo. Es decir: pones a incubar un huevo de 10 km y, a partir de aquí, evolucionas a tres de tus Pokémon. Hecho esto, las probabilidades de que el huevo eclosionado resulte ser un Snorlax son mucho mayores.