'Pillars of Eternity' se desvela, por derecho propio, como uno de los grandes juegos de 2015. Una de las primeras y más satisfactorias sorpresas que ya tenemos en el bolsillo en lo que llevamos de 2015.
Obsidian proponía una vuelta a la época dorada del rol occidental, inspirados en tiempos de 'Dungeons & Dragons' con 'Baldur's Gate' o luego con 'Neverwinter Nights'. Su revival particular se materializa en 'Pillars of Eternity', que salió a la luz con el calor de los 4 millones de dólares aportados por la comunidad en Kickstarter.
Nueva aventura
Lo que nos encontramos en esta aventura es un acercamiento a un mundo rico y complejo, que guarda decenas de horas de juego en su interior. Cuando lanzábamos el análisis escrito hace un par de días, hablábamos de él en estos términos:
"Sobre gráficos y banda sonora, hay que decir que, aunque excelentes, 'Pillars of Eternity' no permite dividir y valorar por separado. Es un todo: historia, gráficos, sonido, efectos, por separado son aceptables, pero en conjunto nos trasladan a la esencia del rol, a la ambientación medieval fantástica, que en definitiva es lo que se le pide al género de rol".
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