Microsoft se equivocó en el planteamiento inicial de Xbox One y en la división de videojuegos reconocen el fallo cometido. Phil Spencer, jefe de Xbox, ha vuelto a tratar este tema ahora que se vislumbra en el horizonte una nueva generación y reconoce que se cometieron una serie de errores con los que no quieren tropezarse de nuevo. Han aprendido de aquel lanzamiento desventajoso y han aplicado esa experiencia a Project Scarlett.
Nacida para triunfar
Durante el último tramo de generación, Xbox ha tenido que tirar de inventiva para reavivar el mercado de su Xbox One, una consola que no empezó nada bien y que ha ido remontando el vuelo gracias a una serie de servicios que ahora son un emblema para Microsoft. Ha sido, precisamente, ese inicio con turbulencias es el que ha hecho que Microsoft se ponga las pilas para no repetir los mismos errores del pasado y poder empezar la carrera por la nueva generación, por lo menos, en las mismas condiciones que el resto de competidores.
Y sí, los miembros de la división de Xbox no tienen miedo de decir que la fastidiaron al lanzar Xbox One de aquella manera. Phil Spencer ha hablado con The Verge y reconoce que cometieron errores como el hecho de lanzar la consola 100 dólares más cara y no haber tenido un catálogo de exclusivos mucho más potente. Pero eso no les ha desmotivado, sino que, según Spencer, esa experiencia les ha servido para hacer de Projet Scarlett un producto de verdadero éxito comercial. El jefe de la división confía en las decisiones que se han tomado para que su nueva consola sea, por lo menos, atractiva como producto.
Spencer asegura que no estarán fuera de competición ni por precio ni por potencia, lo que nos hace ver que Scarlett será una consola puntera (algo que ya demostraron con Xbox One X) y que, además, tendrá un precio ajustado.