La Academia intentó el año pasado, sin mucho éxito, hacer algunos cambios en la gala de los Oscar introduciendo el premio a la película más popular, que todavía sigue aparcado debido a lo impopular de la medida. Sin embargo, unos meses después, la Academia se ve obligada a realizar una nueva innovación. La gala de 2019 no tendrá ningún presentador por primera vez en treinta años.
Kevin Hart había sido el elegido para presentar los Oscar este año, pero a los dos días resurgieron una serie de tuits con chistes homófobos que le costó uno de los sueños de su vida. Finalmente, los productores han optado por un grupo de personas de alto nivel que presentarán los diferentes segmentos de la gala, sin necesidad de un maestro de ceremonias que mantenga la cohesión de la noche. Por lo tanto, el objetivo de la Academia ahora es buscar a estos personajes en menos de seis semanas y crear la estructura y el guion que seguirá la gala más importante del cine. Según fuentes internas, la música tendrá un gran protagonismo este año gracias a que entre los más que probables nominados estarán Lady Gaga, Dolly Parton y Kendrick Lamar.
Intento fallido de volver
La posibilidad de tener de vuelta a Kevin Hart como presentador quedó eliminada después de su aparición en el programa de Ellen DeGeneres, amiga del actor que quería ayudar a recuperar su candidatura. Sin embargo, su discurso como víctima de los trolls de internet y haters en general no convenció para nada a la Academia, que esperaba ver a Hart más compungido y pidiendo disculpas por sus chistes en contra del colectivo LGTB. A pesar de que la posibilidad de recuperar su posición de presentador, Hart ha continuado su paseo por los medios y ha seguido defendiendo sus actos en un intento de lavar su imagen.