Opinión: El E3 2014 de Nintendo, un golpe de efecto

No vamos a caer en el estúpido Nintendo is Doomed, porque me pone, francamente, de muy mal humor. Me hierve la sangre al ver arrastrarse por las redes sociales a gente con sed de sangre en busca del fracaso de la compañía, ¿qué gana el personal al que no le importa nada Nintendo mofándose y alegrándose de que a una empresa que da trabajo a cientos de trabajadores le vayan mal las cosas?. Antes de seguir haciéndonos mala sangre vamos a desatascar este punto del artículo, y dicho esto, lo cierto es que la Gran N tiene entre manos un papelón imponente para el E3 2014.

Con la publicación de los últimos resultados financieros se vuelve a mostrar que los números no acompañan a la empresa. Cosa lógica, porque en los últimos meses ambos sistemas han estado parcos en grandes lanzamientos. Hace poco veíamos las ventas de consolas en Japón alcanzar mínimos históricos (no solo las de Nintendo, fue una caída general), en buena parte debido a la falta de catálogo fresco. De otra parte, con la publicación de los resultados, Nintendo nuevamente vuelve a hacer alusión a sus emergentes dispositivos para mejorar nuestra calidad de vida y sus bolsillos. Esto como jugador me preocupa. Mucho.

Nintendo es una empresa que tiene una dilatada historia antes de centrarse en el mundo del videojuego, pero pensar en que la compañía pudiera dedicarse en un futuro próximo a otros negocios ajenos a éste es algo que no me entra en la cabeza. Sin embargo, esas cuestiones por ahora caen del lado de la incógnita y prefiero desesperarme en el futuro. Ahora vamos a ceñirnos a lo inmediato, y la inmediatez es el E3 2014que arranca en un mes.

No es país para conferencias

Nintendo nuevamente se salta la conferencia de prensa optando por una serie de eventos digitales retransmitidos en streaming que llegarán directamente a los ojos de los fans, y se saltarán, de paso, el trabajo de los que escribimos sobre videojuegos. El Nintendo Direct ya tiene ese doble filo en su más intima esencia. Doblemente beneficioso creo yo, por un lado te permite dirigirte de manera cercana a la comunidad de jugones, y por otro te saltas las hordas de trollcomunicadores que parejos a la moda del trolleo por los clics arrastran a la Gran N por el fango para caer simpáticos a un reducto de lectores. Aunque todas las conferencias del E3 se retransmitan en streaming, la diferencia entre el formato Nintendo Direct y la presentación de Sony, por ejemplo, es obvia: Nintendo habla a la cámara y el resto lo hacen a los asistentes, lo que a nivel psicológico cambia completamente la intencionalidad del mensaje. Por este lado yo creo que es un completo acierto que Nintendo abra las puertas del E3, cerradas para la élite de las acreditaciones, y lo convierta en un espectáculo del que todo el planeta puede ser partícipe.

Pero no todo es color de rosa, luces y colores. Llevándote por delante la conferencia tradicional, también te llevas por delante buena parte de "la magia del E3", y eso es terrible. Sin la grandeza del teatro oscuro, los murmullos, vítores y silbidos de los asistentes, los anuncios pierden lustre, y perder lustre es lo que peor le viene a Wii U ahora mismo. El formato Nintendo Direct funciona, vaya que si funciona, pero Nintendo habituaba a hacer muy buenas conferencias en el E3 y creo que tal y como están las cosas sería el formato propio. Lograr un golpe de efecto con público es mucho más fácil de conseguir que en un vídeo precocinado.

El golpe de efecto

Así llegamos, enlazando el discurso, al núcleo de la cuestión, a la madre del cordero del E3 2014 de Nintendo: el golpe de efecto. Lo que más me amedrenta de Wii U es que Nintendo ha tenido capacidad de reacción nula tras las oleadas de resultados a la baja. No ha habido movimiento público alguno en los cinco meses que llevamos de 2014 para tratar de darle la vuelta a la tortilla, lo que nos lleva a pensar que ese golpe de efecto necesario se tiene que dar en Los Ángeles. Es arriesgado porque se lo juegan a una sola carta, pero este año necesitan dar un puñetazo en la mesa de los que luego resqueman. Un nuevo hardware que no sea una 3DS y Wii U, el emerger de esa hipotética Nintendo Fusion, aunque loco, a medida que le voy dando vueltas, y aunque en el fondo creo que no va a suceder, no me acaba de parecer tan mal plan. Lo veremos. Mientras tanto, mirad a Reggie haciendo de las suyas con los tíos de Mega 64. Cuando os decía que quieren ir directos al público justo a esto me refería, y me encanta, qué narices.