Por Marco Gonzálvez
El 15 de Diciembre 2016 | 20:52
Uno de los videojuegos independientes destacados durante la pasada PlayStation Experience 2016 fue 'Boundless', un proyecto del estudio británico Wonderstuck que lleva en el programa de acceso anticipado de Steam desde noviembre de 2014 y cuyo lanzamiento para PS4 está previsto para el próximo año. Hoy el juego protagoniza su propia entrada en el PlayStation Blog, donde James Austin, director de Wonderstruck, pone en antecedentes a todos los desconocedores de su trabajo.
Man's Space
Nos encontramos ante un juego que promete ofrecer un universo en línea habitado por todos sus jugadores al mismo tiempo, teniendo cada uno de ellos su propio planeta generado de forma procedural mediante la utilización de voxels.
Desde nuestro propio planeta veremos cómo se generan planetas vecinos en los que otros jugadores irán construyendo todo tipo de cosas, algo que podremos ver desde miles de kilómetros de distancia gracias a su presencia en tiempo real en este universo único y compartido.
A estas alturas lo normal es preguntarse si podremos visitar esos planetas vecinos y la respuesta es sí, al menos siempre que tengamos contacto visual. Usando unos totems sagrados podremos marcar una localización en un planeta distante y viajar hasta allí, de la atmósfera respirable, la amenaza de las criaturas hostiles y la estabilidad del terreno dependerá que podamos quedarnos o no.
Un detalle que impresiona de entrada es el comercio del juego. Cada jugador puede encontrar sus propios minerales y con ellos fabricar los muchos utensilios disponibles en el mismo. Lo relevante de este aspecto es que podremos montar nuestra propia tienda y vender así lo que hayamos conseguido a otros jugadores, algo realmente innovador.
La libertad en Boundless se presenta como extrema y como su mayor baza, para muchos ya empieza a ser lo que siempre buscaron en 'No Man's Sky' y el tiempo dirá si merece la pena lanzarse a otra odisea espacial de esta magnitud. De momento en Steam las críticas son dispares, en gran parte por la cantidad de tiempo que el proyecto lleva en desarrollo.