Hay cosas que cuesta creer, especialmente porque demuestran hasta qué punto nuestro fanatismo puede llevarnos a realizar cosas impensables, peo parece ser que esta vez es cierto. Un jugador japonés optó hace veinte años por no apagar su SNES para no perder el progreso de su partida... y ahora se ha dado a conocer su hazaña.
Dos décadas encadenado a la atención de un título de SNES
Cuando algunos de nosotros llegábamos al mundo, este usuario perdía la posibilidad de guardar su partida en un juego de SNES, por lo que la opción más lógica en su opinión fue directamente no apagar la máquina ya que, lógicamente, si no perdería todo su progreso en 'Umihara Kawase', un plataformas bastante alocado y extraño de la mítica Super Nintendo donde tomábamos el control de una chica de 19 años.
El éxito del título en el país del Sol Naciente no fue para nada desdeñable, y el vicio que se tuvo que pegar este nipón a finales de 1994 tuvo que ser tal que cuando conoció que no podría guardar la partida se llevó las manos a la cabeza. El problema se debe principalmente a la memoria de litio de muchos cartuchos de la máquina, lo cual ha provocado que ahora, 180.000 horas más tarde, se haya batido este récord absoluto por prácticamente dos décadas esperando.
Lo que personalmente me cuesta creer y pienso que todos opinaremos igual, es que en todo este tiempo no haya habido un solo apagón eléctrico, lo cual seguramente sí sea un auténtico récord. ¿No se ha ido la luz en 20 años en su prefectura? Eso sí que me gustaría verlo. En cualquier caso, dice que en una ocasión tuvo que apagarla por una mudanza pero fue poco tiempo, de modo que la batería interna del cartucho consiguió aguantar este lapso y no perdió su partida.
Ver para creer. La industria del videojuego no dejará nunca de sorprendernos.