Cada vez que llegamos al final de un trimestre las compañías de videojuegos tienen la tarea de hacer sus respectivos informes periódicos donde podemos ver cómo de bien o de mal lo han hecho en ese periodo de tiempo. Pérdidas, ganancias, previsiones financieras, pronósticos futuros... Todo tipo de datos que vuelven locos a los amantes de este tipo de documentos. Es también un indicativo del estado de salud de las firmas más importantes de tanto Occidente como Japón.
Previsiones más realistas
En el caso de Nintendo son siempre muchas las incógnitas rodeando sus resultados. Desde que Satoru Iwata falleció han sido numerables los cambios a nivel interno en Kyoto, con un Tatsumi Kimishima que apuesta por la unificación y homogeneización de prácticamente todo. 2016 es el año de NX, pero hasta que esa consola sea presentada y, quizá lanzada también, hay que superar un par de trimestres más. Las previsiones financieras de Nintendo para 2016 fueron inicialmente bastante positivas en comparación a lo que podíamos pensar viendo lo poco que está vendiendo Wii U durante los últimos meses, y finalmente ese informe ha sido actualizado... a la baja.
Ahora, la proyección de ventas de Wii U y de Wii sigue siendo la misma con un pequeño incremento en las ventas del software, pero sin embargo se estima que las ventas netas sean un 12,3 por ciento menores de lo que anteriormente se mostraba. Asimismo, con esas presumibles cifras se estarían empeorando los resultados de 2015.
Esto, en mi opinión, solo quiere decir una cosa, y es que el esfuerzo de querer sacar una consola de sobremsa este curso sacrificaría el lanzamiento de muchos juegos ya que el line up de las máquinas de Nintendo no suele ser demasiado amplio. En ese caso, tendríamos que esperar hasta bien entrado 2017 para tener entre manos todos esos juegos de gran envergadura por su parte. Es decir, que en 2016 no vamos a tener muchos lanzamientos de Nintendo. Veremos qué pasa.