Durante la feria Spaceworld 2000, Nintendo mostró al público una demo técnica de lo que las tecnología de Gamecube podía ofrecer para un nuevo 'The Legend of Zelda', con un estilo realista, que finalmente no se utilizó hasta la entrega 'The Legend of Zelda: Twilight Princess' aparecida en 2006. En el recientemente publicado libro 'The Legend of Zelda: Arts & Artifacts', los responsables Yoshiki Haruhana y Satoru Takizawa comentaron por qué se descartó ese estilo visual para decantarse por el estilo cartoon de 'The Legend of Zelda: The Wind Waker' que conocemos hoy día.
Lo realista no impresionaba
La respuesta de Haruhana a por qué se descartó el estilo realista para el primer 'The Legend of Zelda' en Gamecube fue que al crear esa demo técnica se dieron cuenta de que enfocarse en el realismo no era el camino correcto. Se preguntaron además si un juego realista equivalía a uno bueno, porque conforme la tecnología mejoraba, los videojuegos intentaban imitar más la realidad.
El estilo realista se descartó finalmente cuando Haruhana estaba leyendo una revista de videojuegos y notó que había muchos juegos similares y temían que 'The Legend of Zelda' fuese otro de esos juegos. Se preguntaron qué estilo artístico tenían que crear para que los lectores se paren a apreciar el juego al ojear las revistas y llegaron a la conclusión de que no lo harían con un Ganondorf realista. Tras esa conclusión, empezaron a cambiar el estilo artístico del juego y como resultado de ese proceso apareció Toon Link.