El 9 de Noviembre 2015 | 04:38
Llegamos a un momento clave en el calendario nipón, donde la previa a las navidades supone una gran bajada en el ritmo de ventas de hardware especialmente para vivir luego un despunte generalizado que da alguna que otra alegría a las compañías. Desde que Nintendo3DS bajó de precio en Japón allá por agosto de 2011, la portátil estereoscópica se colocó líder de ventas cada semana con ritmos que llegaron a alcanzar las 50.000 e incluso más unidades semanales.
Algo está cambiando en Japón
Mucho han cambiado las cosas desde entonces; pasando por un 2013 espectacular a nivel de catálogo a uno más discreto como este último 2015. La cuestión es que las cosas están cambiando en Japón donde siempre está todo en movimiento. Decimos que PlayStation 4 está despertando, y así es: sus resultados este año son bastante mejores que hace un año, pues lleva ya acumuladas 909.813 consolas vendidas en todo lo que llevamos de 2015 por tan solo 749.948 en este mismo periodo de 2014; pero Nintendo 3DS ha pasado de llevar 2.1 millones de consolas a 1.46 millones ahora mismo.
Estamos hablando de una caída del 31% cuando se cumplían 10 meses completos de 2015, una diferencia que puede ser todavía más grande de cara a final de año, y eso es algo que debería preocupar a una Nintendo que trabaja arduamente en NX.
Parece que el momento de 3DS ha tocado techo, una máquina mágica que en pocos meses alcanzará los 20 millones de unidades. Ojo, esto no significa que 3DS esté muerta, pero con este ritmo no se domina el mercado y es el momento de ir pensando en un relevo generacional que permita recuperar el terreno que ahora ocupa su gran rival. Quizá 2016 sea el año en que salgamos de dudas y conozcamos qué se trama Nintendo realmente en el desarrollo portátil.