La promesa principal de PS4 Pro es ofrecer contenido en 4K, adaptado a los nuevos televisores de alta resolución. Sin embargo, hay una pregunta que rápidamente asaltará a los más avezados en el estudio de resoluciones y recuento de FPS: el hardware es muy barato para la resolución 4K. Por otro lado, en las plataformas actuales a duras penas llega una pequeña porción del catálogo actual a los 1080p 60fps, como para pegar el salto directo a los 4K con una consola de sólo 400 euros. La intuición es el reescalado, y la confirmación la han encontrado los chicos de Vida Extra rebuscando muy mucho entre la información oficial de PS4 Pro que ha llegado a los medios.
Hay que irse a una pequeñísima letra de un pie de página para encontrar la confirmación de que los videojuegos no necesariamente se ejecturán en nativo, sino que pueden ser reescalados a 4K. Si bien se adaptarán a televisores 4K, la resolución nativa del videojuego no será 4K. La BBC también confirmaba en intervención de Jim Ryan que la consola tampoco incluiría reproductor Blu-Ray en 4K, lo que da peso a lo que encontramos en la documentación. Esta función de reescalado es la misma capacidad que incluye Xbox One S, que también ofrece imagen adaptada a televisores 4K a través de un reescalado sin necesidad de un incremento de potencia respecto a la Xbox Original.
No cabe duda de que esta consola incluye un salto en la capacidad técnica respecto a la PS4 actual, pero quizá sea menos abultado de lo que pueda parecer. Ante este panorama, es curioso y confuso que el 4K haya sido el mensaje principal de la presentación.
Netflix en 4K
Hay sólo un grupo de contenido que sí se ejecutará de manera nativa en 4K, y ese es el compatible de Netflix. En la conferencia, Sony comentó que al cierre de 2016 Netflix tendrá 600 horas de contenido 4K en el catálogo, una función que el portal de streaming ya ha comenzado a ofrecer hace tiempo en varios de sus planes.