El 2 de Febrero 2016 | 17:13
Van pasando los años y con ellos vamos despidiéndonos de viejas amigas que nos han dado muchas horas de juego para adoptar en la familia nuevas máquinas que nos hacen volver a disfrutar como cuando éramos unos chiquillos y nos regalaron nuestra primera consola.
Y, como el tiempo no perdona, este 2016 se cumplirán tres años del lanzamiento de Xbox One y PlayStaion 4, cuatro en el caso de Wii U, y sin embargo continuamos sin poder disfrutar de un gran juego que marque un antes y un después en la generación. Pero sobretodo, y lo más importante, noto una gran falta de ideas en la industria que culminen en nuevos y ambiciosos proyectos.
Obviamente en más de dos años hemos tenido tiempo para disfrutar de todo tipo de juegos en todas y cada una de las plataformas. Sin embargo, todas ellas están faltas de nuevas y buenas ideas, ya que se repiten formulas y franquicias que nos llevan acompañando mucho tiempo, como por ejemplo 'Halo 5: Guardians', A lo que tenemos que añadir la moda de los remasters y remakes como 'The Legend of Zelda: Wind Waker HD' o 'Uncharted: The Nathan Drake Collection'.
"Sile, sile, sile..."
En este momento es cuando uno se pone a recapitular todo lo que ha jugado y se empieza a dar cuenta de las similitudes que existen entre los distintos juegos. Unas semejanzas o modas que convierten a cualquier IP en el género del momento, algo que hace que el nuevo 'Metal Gear Solid' sea todo menos un 'Metal Gear' y que acaba consiguiendo que en muchos casos nos acabemos empachando, asesinando en muchas ocasiones las ganas de sentarse delante del televisor a jugar.
Otro ejemplo que me viene a la cabeza rápidamente es 'Bloodborne', un juego excelente (posiblemente el mejor del 2015) que tiene unas bases muy sólidas y reconocibles, la saga 'Souls'. Y si repasamos las listas de los GOTY veréis que tengo razón, ya que esto ocurre con el 90% de los juegos.
En resumen, las compañías buscan a día de hoy rebanarse poco los sesos y captar el mayor público posible, motivo por el cual parece que ponemos un shooter y es el mismo con una skin diferente al que jugábamos el año pasado...
Es por esto que no me puedo creer que a día de hoy todavía no tengamos ese juego que pegue un puñetazo encima de la mesa y suponga un punto de inflexión, algo así como lo que supuso 'Gears of War' en la época de Xbox 360, un juego que sorprendiera por su apuesta jugable y entrará por los ojos dándonos un pequeño anticipo de lo que estaría por llegar.
Por suerte parece que ese momento está muy cerca de llegar, con juegos como 'Horizon: Zero Dawn', 'Quantum Break' o 'Scalebound', así que desde aquí quiero invitar a las desarrolladoras (sobre todo a las first) a que sigan buscando la forma de sorprendernos año a año. Por favor no sobreexplotéis las franquicias, a nadie le gusta ver como sus grandes "ídolos" se arrastran por el suelo y los videojeugos obviamente no son una excepción.