El remake de 'El Rey León' se ha convertido en un nuevo éxito para las cuentas de Disney, pero parece que no todo el personal que ha estado vinculado a la compañía a lo largo de estos últimos años considera que este "live action" sea un producto a destacar o tener en cuenta. Parece que algunos de los animadores de la película original de Disney no están muy satisfechos con el remake.
Según Indie Wire, que recoge la información a través de Slash Film, muchos de los animadores originales se negaron a comentar sobre la nueva película cuando Huffington Post contactó con ellos, algo que ya nos dejaba ver que quizás no eran todo tan idílico, pero los que hablaron no parecieron contentos nada contentos con el resultado de la película.
No es la que recordamos
"Solo me meteré en problemas si comento sobre la otra versión", aseguraba uno de los animadores de forma anónima sobre la nueva interpretación más realista del título. Otro dijo que "hay un gran resentimiento contra estos remakes 3D de los equipos 2D originales. Tal vez si recibiéramos algún tipo de recompensa sería diferente".
David Stephan, uno de los animadores de al original, ha sido uno de los pocos que ha dejado constancia de su pensamiento al asegurar que "si se preguntase al equipo del 'Rey León' original, la mayoría diría ¿Por qué? ¿Realmente tenías que hacer eso? Duele un poco. Es un poco triste que el accionista esté ahora en la sala decidiendo qué películas se hacen y cuáles no".
"Disney ahora se quitó la máscara, y ahora está dejando ver su cara: 'Sí, solo queremos ganar dinero'. Eso es decepcionante como artista, desde un estudio que se fundó en la originalidad y el arte", explica el animador. Stephan y algunos de los otros animadores creen que el estilo más realista es demasiado restrictivo, lo que reduce la expresión permitida por la animación original, algo que también han criticado muchos de los espectadores que ya se han acercado a ver la película.
"Me saca de la película, literalmente", aseguraba el animador, que mostraba su impacto ante la animación con un ejemplo concreto. "Especialmente con el pequeño Simba caminando. Fue muy real. Y luego, cuando hablaba, me recordaba a esas viejas películas de la naturaleza donde doblaban las voces y los labios se movían. Pensé: Oh, esto es realmente barato. Creo que fue demasiado pronto para esto", asegura.
En cualquier caso, y a pesar de la falta de estas animaciones que conviertan a los personajes en más expresivos, la película se ha convertido en todo un éxito para la compañía, llegando a superar incluso a la original, siendo la segunda live action del año para la empresa que supera los mil millones tras 'Aladdin'.