El 22 de Febrero 2016 | 17:32
Hay un par de situaciones en la actualidad que me despiertan curiosidad. El uno es NX de Nintendo, sistema sobre el que tenemos muchas incógnitas y mucho espacio para hablar por delante, el otro es la simbiosis entre Xbox y el PC. La marca de Phil Spencer está tratando de poner sobre la mesa un ecosistema para jugar que reúna al jugador de consola y al de ordenador, juego cruzado y catálogo de exclusivos compartido entre Windows 10 y Xbox One. Hemos ido viendo a los exclusivos de Xbox One, uno por uno, desfilar en fila india camino a Windows 10. Así, Xbox pasa a ser comprendida como una marca que reúne juegos en PC y en consola, y no sólo como un sistema de consolas tradicional. No vamos a entrar de nuevo en este debate, ya cae en lo reiterativo. Ahora vamos a posar la vista sobre el juego en ordenador y el potencial o futuro que la marca busca en Windows 10.
Se dice una y otra vez que Microsoft está lanzando sus juegos exclusivos en PC para rentabilidad los lanzamientos gracias a mayor número de ventas. Esto es una visión directa, a la vez que limitada y pobre. Es el pan para hoy y el hambre para mañana. Una videoconsola, o una tienda digital como Steam, por ser un sistema cerrado de distribución, reporta a la compañía propietaria de la marca ingresos brutos sin mayor inversión. De cada juego que se publica en Steam, Gabe Newell, sin hacer absolutamente nada más que gestionar su plataforma, se lleva una buena tajada. Igual sucede con PlayStation, igual sucede con Xbox, con Nintendo... Ahí está el verdadero negocio para las marcas de hardware o tiendas.
Hasta ahora Microsoft había vendido todos sus juegos en Steam, juegos como 'Fable' o 'Age of Empires'... Todo era, en realidad, un poco desconcertante. Una empresa mastodóntica como esta limitándose en videojuegos a ser productora de software parece una visión pobre y conformista. Sin embargo, todo cobró sentido en los últimos días cuando Xbox clarificó que 'Quantum Break' en PC sólo se venderá en la Windows Store. Nada de Steam, nada de Origin, nada de nada. Sólo Windows Store. Los jugadores hemos puesto el grito en el cielo, porque todo lo que no sea Steam es, lógicamente, merecedor de una mirada desafiante y desconfiada. Pero, a nivel de negocio, el círculo se va cerrando. La intención de Microsoft en ordenador es crear un sistema de videojuegos, tienda incluida, en base a la Xbox App que viene de serie con Windows 10. La idea, aunque abiertamente no lo digan porque es pecar de soberbio y eso es lo último que a Phil y los suyos les hace falta, es competir abiertamente con Steam. Convertirse en sustituto de Steam, y así si pueden hacer mucho dinero. Tanto o más que con una consola convencional.
Pregunta obligada, ¿tiene alguna posibilidad?
Y aquí la respuesta es incierta, pero habría que hacer un par de apreciaciones muy importantes. La primera es que mientras Phil Spencer siga al frente de Xbox cualquier posibilidad es tangible. Con Xbox One llegó muy tarde y en un panorama muy oscuro, y ha logrado lo imposible escuchando y comprendiendo a los jugadores.
Por otra parte, el terreno de PC es muy diferente al de consola por tres o cuatro motivos clave. El primero de ellos es que no hay un coste de entrada. En mi ordenador puedo tener Steam, Origin, Battle.net y todo me cuesta cero euros. En el terreno de las consolas elegir una plataforma requiere un desembolso de base que en PC no existe. De tal forma que si me interesa jugar 'Quantum Break' o 'Killer Instinct' instalaré la Xbox App sin mayor miramiento, aunque sólo sea para esos juegos concretos. La puerta de entrada es sencilla, lo complicado es convencer a los jugadores para quedarse ahí y no volver al Steam habitual. Eso es lo realmente difícil.
La segunda diferencia clave respecto al terreno de las consolas es que en videoconsolas las generaciones se mueven a base de impactos. Hace dos o tres años que tenemos los actuales sistemas en la calle y desde hace mucho el panorama está muy definido, con pocos visos de dar la vuelta hasta que dentro de otro par de años se comience a pensar de nuevo en renovar el hardware. Con los ordenadores es más una evaluación contínua, una carrera de fondo, un mantenimiento de los servicios... y en Xbox One Microsoft ha demostrado saber muy bien mantener el sistema con novedades constantes en actualizaciones mensuales. Esa filosofía en PC encajaría todavía mejor.
¿Alternativa en potencia?
Así, y ante este panorama, hoy, 22 de febrero, no se puede ni pensar por un momento en Windows Store como alternativa de Steam. No hay nada hecho, no hay ni intuición, no existe en estos momentos como alternativa. Pero, dentro de un año estaremos hablando de Xbox como plataforma de juegos de PC que también está entrando en este gallinero, y dentro de cuatro o cinco puede que sí sea una alternativa real si logra dar motivos convincentes para ello.