El 16 de Junio 2017 | 03:22
Durante 2015 estuvo muy candente el tema del supuesto acoso que Konami practicaba a sus empleados y cómo les desmotivaba al hacer cada vez más pequeña su división de videojuegos de consolas para virar hacia los móviles y juegos más sostenibles. Fruto de ello el desarrollo de 'Konami' se vio lastrado e Hideo Kojima se fue poco después de terminar el juego y ahora está desarrollando 'Death Stranding' gracias a un acuerdo con Sony Interactive Entertainment. Ahora Konami está sacando juegos de pachinko, entregas anuales de 'Pro Evolution Soccer' y rara vez saca un título que no sea anual como 'Super Bomberman R' para Nintendo Switch o 'Metal Gear Survive'.
Konami tiene muchos trapos sucios
Hace unos días el periódico Nikkei sacó a la luz un reportaje de investigación sobre cómo el acoso de Konami va mucho más allá, al supuestamente comenzar a presionar a a ex-trabajadores. Asegura Nikkei que meses después de desertar de Konami, Hideo Kojima recibió una carta de la compañía en la que decían que le estaba faltando el respeto a la empresa por unos comentarios en el Tokyo Game Show de 2016 sobre su opinión de 'Metal Gear Survive' que podrían infringir una cláusula de su contrato que le impiden hablar de ellos una vez se marchó. También está el caso de un ejecutivo de Kojima Productions que se fue a formar un acuerdo a la sociedad de seguros médicos ITS Kenpo para sus empleados pero fue denegada inmediatamente por el director antes de llegar a una junta para aceptarla en votación de los ejecutivos, posiblemente por presión de Konami.
Un empleado de una agencia de contratación comentó para el medio japonés que suele notificar a empresas de desarrollo de juegos si un potencial nuevo empleado ha trabajado para Konami, porque estos suelen presentan reclamaciones legales a quienes los contraten, y grandes firmas piden a sus departamentos de recursos humanos que no contraten a extrabajadores de Konami. Tal parece el grado de vigilancia que tienen sobre los trabajadores que abandonan la empresa que uno decidió trabajar en una empresa de construcción para así intentar que Konami no descubra que ha ido a otra empresa de videojuegos, otro trabajador fue al sector de la televisión para descubrir que recibieron instrucciones de no contratarle, y también lograron que otro extrabajador cierre su negocio personal debido a la presión por parte del gigante japonés.
El reportaje de Nikkei afirma que todo aquel que han trabajado en Konami tienen prohibido mentarlo en sus CV porque, según su política, si alguien se va no puede apoyarse en ellos para conseguir un nuevo trabajo.