'Kingdom Hearts III' ha cambiado enormemente desde que se presentó su primer tráiler en junio de 2013. Cinco años después, la tercera entrega numerada de esta saga está a punto de llegar al mercado con cambios sustanciales en su desarrollo, como, por ejemplo, el motor gráfico, que pasó de ser Luminous Engine a ser Unreal Engine 4. Esta decisión supuso un punto de inflexión en el trabajo y quienes la tomaron no tenían nada que ver, directamente, con el desarrollo del juego.
De arriba a abajo
Aunque las decisiones creativas corresponden, generalmente, a los responsables de cada desarrollo, hay veces que la directiva de la empresa toma cartas en el asunto para ejecutar ciertas comandas que tienen que ser acatadas directamente. Esto es lo que pasó con 'Kingdom Hearts III', título que iba a funcionar sobre Luminous Engine, el motor de 'Final Fantasy XV', pero que finalmente se decantó por Unreal Engine 4, el motor gráfico que han usado la mayoría de títulos para la actual generación.
Esto quiere decir que el hecho de cambiar un motor por otro no fue decisión del equipo de Tetsuya Nomura, sino que vino "de más arriba", como el japonés afirma en una reciente entrevista que ha dado a la revista EDGE. En ella, Nomura trata por primera vez, y algo más en profundidad, el espeso asunto que rodeó a esta decisión y que hizo que el juego perdiese bastante tiempo de trabajo que ya estaba adelantado. Con todo, el director del juego cree que el cambio fue bastante positivo, ya que las posibilidades de Unreal Engine 4 les permitió trabajar con muchísima agilidad.
Luminous Engine sigue siendo uno de los puntos negros de Square Enix en la actualidad, ya que Hajime Tabata, responsable del grupo del motor de juego, abandonó la compañía el pasado 31 de octubre para fundar su propia desarrolladora.