Como suele pasar en política tras confirmarse el resultado de unas elecciones, todos han ganado. Hablamos de las dos consolas más potentes (PS3 y Xbox360) y de sus últimos lanzamientos en materia de periféricos, que por las cuentas que nos llegan desde Sony y Microsoft, parecen estar arrasando en el mercado.
Según Don Mattrick, ejecutivo de la compañía fundada por Bill Gates, los usuarios del Kinect de la Xbox360 están "encantados" con el sensor de movimientos, una acogida cuanto menos insospechada semanas atrás, cuando los amantes de la videoconsola criticaban el hecho de hecho de poder jugar sin mando. No obstante, las cifras de ventas le conceden la razón a Mattrick, ya que el juguete de moda ha vendido su primer millón en los primeros 10 días. Y las previsiones dicen que en navidades se disparará está cifra.
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Sony también tiene su público
Por su parte, en Sony también sacan pecho con su PlayStation Move, el sensor mediante control por movimientos diseñado para PlayStation 3. Para reafirmarlo nos llegan declaraciones del hombre importante de la compañía en Latinoamérica, Mark Stanley, que ha mostrado su satisfación con el producto en el portal IndustryGamers: "Estamos poniéndonos al día abasteciendo el producto, puesto que la demanda en Estados Unidos y el resto del mundo ha superado ampliamente nuestras expectativas". Este éxito puesto en cifras se traduce en 2,5 millones de unidades desde su puesta a la venta el 15 de septiembre. Lo dicho, hay mercado suficiente como para que nadie termine perdiendo.