Seguro que Jenn Frank, ex-empleada de 1Up, no esperaba que la pequeña broma que lanzó recientemente a su comunidad de fans fuese a causar tanto revuelo. Jenn propuso que alguien debería hacer un juego que estuviese relacionado con un asunto tan sencillo como tener tetas: "Podríamos ver como un personaje sexy de un juego, llora desconsoladamente porque no encuentra un sostén de su talla o porque tiene que hacerse una mamografía".
Los pechos fuera del ámbito sexual
Lo que empezó siendo una declaración de la periodista sobre los inconvenientes que suponen tener estos atributos, encendió una larga mecha de comentarios. Docenas de usuarios, entre los que también figuraban transexuales, formularon diferentes propuestas para llevar a cabo, hipotéticamente, el videojuego. Jenn defiende que los pechos tienen muchas connotaciones en la vida de las personas más allá de la faceta sexista que los videojuegos se empeñan en explotar.
Esta idea resulta bastante interesante, sobre todo teniendo en cuenta que nos encontramos ante una industria que, en la medida de lo posible, intenta siempre evitar hablar de estos temas. El mercado está falto de títulos que promuevan la educación sexual y cierta sensibilidad ante el aspecto emocional que implica tener ciertos atributos físicos.