El 23 de Octubre 2019 | 10:58
Hace algunos años cuando se hablaba de campañas que nos permitían reservar algún producto los consumidores teníamos la certeza de que, en el momento de su lanzamiento oficial, podríamos contar con una unidad de aquello que habíamos reservado, algo que se ha extendido también a mercados como el digital, donde se realizan pre-reservas de proyectos que igualmente estarán disponibles sin rotura de stock, pero en el mercado físico parece que ni siquiera ser uno de los primeros clientes del producto, en este caso de Stadia, te asegurará poder disfrutar de él desde el momento en el que se lance al mercado, o al menos eso han asegurado desde la compañía a pocas semanas de su lanzamiento.
Por orden de reserva
Google ya anunció que Stadia comenzaría a funcionar a partir del próximo 19 de noviembre. A partir de ese momento los usuarios que hubiesen mostrado su apoyo al servicio a través de la Founder y Premium Edition contarían en sus domicilios con el hardware incorporado en dichos packs, que pasa, entre otras cosas, por el propio controlador de Stadia, pero eso no será finalmente así y la llegada de estos paquetes a los primeros usuarios será de forma escalonada por orden en el que se llevó a cabo la reserva.
Según ha explicado la compañía a The Verge, los últimos usuarios en reservar la Founder Edition y todos los que en estos últimos días se han sumado a la edición premium no tendrán asegurada su copia para el día de lanzamiento, lo que nos vendría a mostrar que quizás se han llevado a cabo más reservas de las que inicialmente la compañía esperaba poder colocar en el mercado, causando así una rotura de stock que, sin duda, nos daría ciertos días de noticias vinculadas al lanzamiento del producto.
También existe la posibilidad de que realmente se haya llevado a cabo una producción muy escasa de los materiales necesarios para disfrutar de Stadia en todo su potencial, aunque en cualquiera caso deberemos esperar aún unos cuantos días para poder comprobar cómo funcionará la primera incursión oficial de la gigante de servicios en el mundo del videojuego, un sector al que varias de las compañías más importantes del sector tecnológico están comenzando a ver como una nueva vía de mercado.
En el caso de Google su apuesta es bastante arriesgada al basar toda su infraestructura en el poder de la nube y el streaming, algo que otras con más experiencia dentro del sector del videojuego, como Microsoft, ya intentó inicialmente con Xbox One y no terminó de encajar, aunque ahora, gracias a las mejoras producidas en estos años, parece que podríamos estar ante los primeros pasos del que podría ser el futuro del sector aunque algunos usuarios no estén muy abiertos a él.