El 16 de Noviembre 2017 | 18:58
GameShell ya está financiada en Kickstarter. Se trata de una consola portátil retro capaz de emular títulos de múltiples consolas antiguas. Con un diseño reminiscente de la Game Boy original, este hardware es un sistema modular con carcasas y módulos intercambiables. Además de ejecutar obras de NES, SNES, Game Boy o Game Boy Advance, también puede emular 'Doom' y 'Cave Story'.
El futuro del retro portátil
Todo ello gracias al uso de GNU/Linux como sistema operativo y la posibilidad de cargar roms desde una tarjeta microSD de entre 4 GB y 32 GB. La pantalla reproduce los juegos a color, pero también tiene limitaciones, como soportar solo títulos de hasta 16 bits. Clockwork ha confirmado que en un futuro próximo darán soporte a videojuegos como 'Doom II', 'Strife' o 'Heretic'.
Otra de sus virtudes es que otorga herramientas para programar nuestras propias obras y mods gracias a su compatibilidad con Phyton, LISP, lua y C. La batería cuenta con 1050 mAh, por lo que su duración estará en torno a las tres horas. Su CPU consta de cuatro núcleos Cortex-A7 y la GPU es una Mali 400. La pantalla, muy similar a la de Game Boy Advance, es una TFT de 2.7 pulgadas con una resolución de 320x240p.
La entrega para los mecenas está prevista para abril de 2018 y, aunque ya superan por más de 40.000 dólares la financiación necesaria, todavía quedan 32 días de campaña. El coste para conseguir una es de 89 dólares. En ese precio se incluye una microSD con juegos, una camiseta de Clockwork, un logo y, por supuesto, la propia consola.