Seguramente estés cansado de acercarte a la nevera y ver siempre lo mismo. Cabe también la posibilidad que tengas decenas de imanes y algún que otro recuerdo de ese viaje inolvidable que hiciste tiempo atrás. Sin embargo, nada es comparable a tener una Game Boy incrustada a tu frigorífico; y aunque te pienses que se trata de algo inconcebible, aquí está Internet para desmitificar cualquier cosa que parecía imposible y demostrar hasta dónde somos capaces de llegar.
Ver para creer
Daniel d'Entremont es el autor de esta sensacional iniciativa, también conocido como The Cold Boy, pues ha conseguido que con una Raspberry Pi 2 con un RetroPie incorporado (un compendio de emuladores de consolas clásicas) y un monitor viejo que ya no utilizaba, ha conseguido hacer de su pequeña nevera donde almacena sus refrescos, etc., una auténtica Game Boy aderezada con enormes botones de dirección y acción... ¡totalmente utilizables!
Os recomendamos que no dejéis de ver el vídeo, porque jugar a 'Pokémon Azul' y escuchar al Profesor Oak dándote la bienvenida al mundo Pokémon sabiendo que tienes todos tus refrigerios justo detrás de la puerta de la nevera es para quedarse boquiabierto.
Game Boy Fridge
Lejos de la utilidad que tenga todo esto, hay que reconocer el increíble trabajo de Daniel, porque tanto la propuesta a nivel conceptual como el resultado físicamente hablando es alucinante. Botones perfectamente coloreados, respeto ínfimo por el diseño original... Poco más se puede decir de esta Game Boy (bueno, de esta pequeña nevera).
Tanto esto como el resto de trabajos de Daniel d'Entremont podéis encontrarlos en su blog oficial, donde además de todo esto también esconde otro tipo de creaciones con ordenadores y otras consolas clásicas. Todas ellas coinciden en la limpieza y acabados de los productos finalizados, que parecen ser viables incluso para un comercio convencional. Y a ti, ¿Te gustaría tener una Game Boy en la nevera?