La industria del videojuego en Norteamérica puede respirar tranquila, de momento, ya que el gobierno de Trump ha dejado fuera de su subida de impuestos a las videoconsolas. La USTR (United States Trade Representative), ha emitido un comunicado en el que informa de una nueva fecha para la aplicación de estos aranceles (un 10% más) y también actualiza la lista de productos en los que se hará efectiva la subida de precios a la hora de su importación de China.
Reducción drástica
Después de los tira y afloja entre Estados Unidos y China, ambos países acordaron una tregua para poder negociar mejor el acuerdo de fronteras que no afectase gravemente a la economía mundial. Las conversaciones han debido llegar a buen puerto (a un mejor que el original), ya que la oficina de comercio norteamericana ha publicado un nuevo documento en el que informa de los productos afectados por la subida de impuestos y son muchísimos menos que los que se incluían en la hoja de ruta original.
Entre los que se libran del encarecimiento están las principales consolas de videojuegos: PlayStation 4, Xbox One o Nintendo Switch, aunque la electrónica sigue siendo una de las áreas a las que se le ha aplicado la subida de impuestos: "teléfonos móviles, consolas de videojuegos, algunos juguetes, monitores de ordenador y ciertos artículos de calzado y ropa", reza la nota de prensa emitida por el organismo estadounidense. La subida del impuesto de aranceles iba a aplicarse el 1 de septiembre, pero se ha retrasado al 15 de diciembre para que no afecten a las compras navideñas, que en EE.UU. se producen entre finales de noviembre y principios de diciembre.
La lista, que podéis comprobar en el portal web de la USTR, se ha reducido drásticamente, ya que de las 122 páginas que tenía en su versión original, ha pasado a tener solo 21 páginas.