La cadena GameStop de Norteamérica es la cadena de tiendas especializadas en videojuegos más extendida del continente, pero sus políticas de trato a clientes así como insistencia en animar a reservar o los precios que se dan por juegos de segunda mano no son de lo mejor vistos. Un usuario de NeoGaf ha estado mirando el subreddit no-oficial de GameStop para hablar sobre la cadena de tiendas en las que muchos trabajadores se han estado quejando de su política de porcentajes de ventas para incentivar que el dinero que entra se quede en la circulación interna de GameStop y no vaya a terceras empresas.
Prefieren no vender a vender
La política interna de GameStop dice que todas las tiendas deben cumplir cuotas del Círculo de Vida, que se compone de las reservas, ventas de juegos de segunda mano, canje por saldo y los regalos por puntos de compra a socios con el servicio Power Up. Cada empleado tiene que conseguir que cierto porcentaje de sus operaciones totales que pertenezcan a estas categorías cumpla su objetivo, y lograr el objetivo en al menos tres de ellas. Parece complicado, pero todo se hace para que el dinero se quede dentro de GameStop aunque esto ocasione muchos problemas a los propios trabajadores de la cadena.
El usuario 7DollarHagane que ha abierto un tema con declaraciones en NeoGaf, ha encontrado historias de tiendas que tienen que mentir sobre la disponibilidad de productos nuevos o rechazar canjes con tal de mantener sus cuotas; pagar compras de su propio bolsillo para equilibrar sus cuotas, usar puntos de socios para las recompensas de Power Up sin su permiso o colarles una suscripción cuando hacen compras grandes. Una vez, un comprador buscaba una Xbox One Slim para tener 4K dado que la Xbox One original que tenía se estropeó, y el dependiente no hizo nada para intentar venderle una nueva y comenta que "resulta gracioso que estés feliz de no haber logrado una venta porque te conviene no tenerla". En resumen, los empleados se quejan de que les presionen para vender títulos de segunda mano y conseguir reservas en vez de que vender los juegos que tienen en las estanterías desde hace meses.