El 16 de Marzo 2016 | 18:13
Ayer supimos por fin la mayor de las incógnitas respecto a PlayStation VR: su precio. Finalmente son 399 euros, más los complementos necesarios, los que nos separan de introducirnos en una nueva manera de jugar a videojuegos. En absoluto es caro, al menos si lo comparamos con otros ya conocidos como Oculus Rift y HTC Vive, pero mi duda sigue ahí: está claro que jugaremos como nunca antes, pero... ¿será eso necesariamente mejor? Por el momento, se sigue hablando de la "experiencia de la realidad virtual", y a mi la palabra "experiencia" ya me da bastante mala espina. "Experiencia" no es lo mismo que "videojuego", y lo que finalmente nos ofrecerá PlayStation VR sigue sin estar claro.
Durante la pasada PlayStation Experience de diciembre vimos algunas demos de algunos juegos para este dispositivo. 'RIGS', de Guerrilla e 'EVE Valkyrie' tenían auténtica buena pinta, pero también descubrimos un juego de zombies en un taxi y otro con una mezcla tan estrafalaria como poco atractiva: robots y golf. Si estas dos últimas son el ejemplo del tipo de experiencias al que se refieren, que no cuenten conmigo, pero ni a 399 euros ni a 199. No, entonces yo me bajo del carro de la realidad virtual desde ya mismito.
Incluso diría que el precio genera aún más dudas. Es la mitad de lo que costará HTC Vive, y cerca también del 50% de lo que costará Oculus Rift. Haciendo la lectura simple... ¿significa eso que será una experiencia la mitad de gratificante? Aún en el caso de que realmente sea así, cabe un punto a favor -hipotético- de PlayStation VR, y es que según analistas, tanto HTC como OR se están centrando en temas más sociales que de videojuegos, y es ahí donde Sony lleva la ventaja.
Oculus Rift es propiedad de Facebook, con lo que eso conlleva -¿qué planes tiene Zuckerberg para este dispositivo?- y el mayor negocio de HTC son los teléfonos móviles. Sin embargo, de un tiempo a esta parte, para Sony, la mayor fuente de ingresos viene de los videojuegos con muchísima diferencia -salvándole de años con resultados realmente malos-, siendo PlayStation 4 su producto estrella a nivel global. La apuesta de Sony está clara: veremos videojuegos en PlayStation VR, pero... ¿de qué calidad?
A lo largo de los anteriores cuatro párrafos no he hecho más que preguntarme cosas, y lo seguiré haciendo hasta octubre. Si la calidad de estos videojuegos toma la forma de experiencias casuales, PlayStation VR no entrará en mi casa, pero si me dicen que podré jugar de manera plena a títulos como 'No Man's Sky' o disfrutar de cosas como 'P.T.', el mes de octubre no faltaré a la cita con el dispositivo.