La primera parte del E3 2012 ya ha acabado. Microsoft, Sony y Nintendo han celebrado sus tradicionales conferencias para mostrar sus novedades de cara al próximo año. Y si tenemos que resumirlas en una palabra, esa es decepción.
Sony y Microsoft ya nos avisaron de que no habría nada de next gen en este E3. No les creímos pero así ha sido: ni rastro de PlayStation 4 o Xbox 720. Pero no sólo eso. Nintendo tampoco se ha mojado presentando nada nuevo de Wii U: la única sorpresa relativa al hardware ha sido el anuncio de que podrán utilizarse dos pads con pantalla con una consola. Pero ni rastro de especificaciones técnicas (se centran en los juegos asegurando que no son importantes), y tampoco de precio o fecha concreta de lanzamiento más allá de un ambiguo final de año.
Mucha secuela y poca novedad
Que en tiempos de crisis más vale apostar sobre seguro es una máxima que cualquier empresa aplica y en videojuegos no iba a ser menos. En estas conferencias hemos visto las enésimas partes de sagas de éxito consolidadas: nuevos 'Halo' en el caso de Microsoft, 'God of War' para Sony o 'Mario' y 'Pikmin' en casa Nintendo.
Sony ha sido la única en mostrar un ápice de innovación desvelando un nuevo título, 'Beyond', así como el ya previamente anunciado 'The Last of Us'.
Cuestión de foco
Las conferencias de este año también nos han servido para ver hacia dónde quieren llevar sus máquinas las tres grandes. Si el año pasado Kinect fue el protagonista absoluto en Microsoft, el foco este año en Redmond estaba en hacer de Xbox 360 el centro del entretenimiento sobre el que giren varios dispositivos, preparando el lanzamiento de Windows 8 y haciendo que tabletas y móviles interactúen con una Xbox que tendrá más contenidos de televisión, más servicios y más películas.
Sony, por su parte, ha querido poner énfasis a su catálogo de juegos exclusivos. 'Beyond', 'The Last of Us', pero también un nuevo 'God of War' para intentar demostrar que PlayStation es única. La firma nipona afronta este E3 como un periodo de transición tras nombrar a Kaz Hirai como nuevo CEO hace unas semanas y para muchos se ha quedado coja en el apoyo a PS Vita. Algo de cross play pero un catálogo todavía insuficiente donde las dos grandes novedades, un 'Call of Duty' y 'Assasin's Creed' propio, son de third parties.
Por último, Nintendo que se la juega al todo o nada con el lanzamiento de Wii U. Los nipones no están dispuestos a repetir los errores del lanzamiento de Nintendo 3DS y quieren que Wii U sea sinónimos de juegos, juegos, y juegos. Apenas ha habido mención al entretenimiento de cine o series (que Wii U también reproducirá) y sí a los títulos con un doble equilibrio: entre el casual y hardcore gamer, así como entre los títulos propios y las third parties. El catálogo de Wii U promete ser fuerte para sus primeros meses de vida con Mario y Pikmin como sagas estrella, aunque se ha echado en falta algún anuncio más potente. Sí, estamos pensando en Zelda.
En definitiva, las tres conferencias no han sido lo que esperábamos. El nivel ha sido bajo y nadie ha querido mostrar más de lo debido.