Japón es un país que se encuentra en una de sus peores épocas desde que se contabilizan los datos de ventas de software y hardware relacionado con el videojuego. La presente década está siendo especialmente difícil tras los acontecimientos de hace ahora casi 4 años en la central de Fukushima. Desde entonces, tanto monetaria como socialmente, el país del Sol Naciente vive una tesitura indeseable; aunque ellos sepan mejor que nadie cómo remontar los vuelos, el sector del consumo se ha visto resentido, sumando además la irrupción de los smarthphones, que poco a poco van comiendo la cuota de mercado de las portátiles.
Dicho esto, hay que dejar claro que cuando ante veíamos un ritmo semanal de más de 50.000 unidades de una consola, cualquiera, eran datos notables, mientras que ahora son sobresalientes. Con los juegos pasa algo parecido; 500.000 unidades en una semana es algo al alcance de muy pocos. De hecho podemos citar aquellos que son capaces con los dedos de dos manos. Uno de ellos es 'Dragon Quest', mejor dicho, cualquier producto que lleve serigrafiado este nombre.
Hace unas semanas conocimos la confirmación en Occidente de 'Dragon Quest Heroes' para PS3 y PS4, pero en Japón ya pueden disfrutar de él. Parece que les ha encantado esto de realizar crossover entre sagas, y a decir verdad 'Dragon Quest Heroes' está causando fervor entre los nipones, pues sus números han ninguneado por completo los alcanzados por 'Hyrule Warriors' hace unos meses.
En concreto, estamos hablando de 325.000 copias para la versión de PS3 -consola que sigue gozando de buena salud en Japón- y 269.000 para la de PS4. Esto hace un total de prácticamente 600.000 unidades. Square Enix puede darse un canto en los dientes, y es que con productos derivados como éste o 'Theatrhythm Dragon Quest', que llegará a finales de mes a esas tierras, los años fiscales se cierran con otros ojos, ¿o no, Square?
Por último, decir que el lanzamiento de 'Dragon Quest Heroes' propició un gran aumento en las ventas de PS4, consiguiendo 46.000 unidades en los últimos siete días.