Reconozco que soy un auténtico enamorado de 'Dragon Age: Inquisition', y reconozco que llevo cerca de 80 horas jugadas al título y todavía me quedan más y más cosas por hacer. ¿Y sabéis qué? Que las voy a hacer todas. O las que el tiempo me permita antes de que otro título llegue a mi consola y haga que me desenganche de la obra de BioWare. Y es que este juego emana amor por los cuatro costados. Entiendo algunas de las críticas recibidas, sobre una supuesta "casualización" o una mala forma de gestionar y separar las misiones principales de las secundarias; pero es que eso es justamente lo que a mí me enamora. Sentirme un auténtico Inquisidor que tiene que enfrentarse a varios frentes, no sólo a la amenaza que la línea de misiones principales nos propone.
El mayor éxito de BioWare
Y parece que no soy el único que ha disfrutado del último título de BioWare, ya que las últimas informaciones que ofrece la compañía nos hablan de que 'Dragon Age: Inquisition' es ya su mayor éxito. Casi 1500 millones de dólares de ganancias, que para los que no lo sepáis, son mucha pasta. Al parecer la compañía había puesto una cifra de ganancias esperadas (lo suelen hacer todas) y en función de ello valoran si el juego es un éxito o un fracaso, en este caso ya sabéis el resultado.
Pero yo no valoro el éxito de 'Dragon Age: Inquisition' basándome en la pasta que han ganado o no han dejado de ganar en BioWare (que a mí ni me va ni me viene y sólo me entretiene) sino que valoro la inmensísima cantidad de horas que parece que dedican todos los jugadores al título. Cifras también astronómicas que me hacen saber que no soy el único enamorado del juego, y de que no soy el único que disfruta como Varric (si pilláis el chiste enhorabuena) yendo por ahí a matar dragones, o a poner flores en la tumba de un pobre hombre a la que su viuda no puede acceder porque hay peligros por el sendero, o a intentar ligarme a Cassandra, Leliana, Sera y todo lo que se mueva. Hasta le he tirado los trastos a Cullen.
Enhorabuena, BioWare, y enhorabuena a sus jugadores. Yo voy a seguir con mi épica aventura.