De entre los videojuegos de consola, hoy día 'Call of Duty' seguramente sea la saga más exitosa de cuantas pueblan las estanterías. Año a año acudimos a un nuevo lanzamiento, y los números de ventas parecen indicar que estamos ante una franquicia comercialmente incombustible. Mañana 5 de noviembre llegará a las tiendas la nueva entrega, 'Call of Duty: Ghosts', y repite presentándose como uno de los lanzamientos clave de esta recta final de año.
Sin embargo, antes de la llegada de 'Call of Duty' había otro gallo en el gallinero. Dentro del género bélico, allá por los años 2000, era 'Medal of Honor' el que sentaba precedentes. La saga de Electronic Arts ambientada en los acontecimientos de la Segunda Guerra Mundial era todo un referente.
"MOH Killer"
Tal es así, que hemos conocido la curiosidad de que el primer 'Call of Duty', desarrollado por Infinity Ward en 2003, también ambientado en la Segunda Guerra Mundial, llevaba el nombre en su fase de proyecto de "Medal of Honor Killer". Justin Thomas, antiguo artista en Infinity Ward, lo explicaba así:
"El proyecto fue llamado "MOH Killer" hasta que encontramos un nombre oficial. Estábamos más centrados en la diversión que en el éxito, con la idea de que si era divertido sería un triunfo. Solo queríamos hacer un buen juego e hicimos las cosas mejor que en nuestros anteriores proyectos. Lo mejor es que el equipo aprende de proyectos anteriores".
El resultado lo tenemos hoy ante nuestros ojos. En poco tiempo la popularidad de 'Call of Duty' subió como la espuma, mientras que la de 'Medal of Honor', con un par de pasos en falso, cayó en picado. Hoy día el competidor de 'Call of Duty' es 'Battlefield', mientras que la saga 'Medal of Honor' se ha quedado relegada a un plano muy secundario.