El 8 de Noviembre 2017 | 13:32
Blizzard sigue endureciendo sus medidas para evitar que los jugadores más tóxicos ensucien la experiencia de la comunidad de 'Overwatch'. La compañía creará un equipo dedicado a vigilar a aquellos usuarios que más problemas den al resto de compañeros en las partidas y se encargarán de mantenerlos monitorizados para aplicar sanciones si es necesario. Además, desde el estudio se plantean ser más severos en los castigos de cara a los jugadores reincidentes.
Equipo de vigilancia
Uno de los mayores problemas que tiene ahora mismo 'Overwatch' en también una de sus mayores virtudes: su extensa comunidad. Este ecosistema incluye a jugadores que se respetan y mantienen un clima de juego estable y otros cuyas actitudes solo enturbian la experiencia de juego. Por este motivo, y porque las medidas tomadas no terminan de ser efectivas, Blizzard se ha puesto en movimiento.
Jeff Kaplan, director del juego, explicó a Kotaku durante la pasada BlizzCon 2017 que prepararán un equipo de personas que se dedicará exclusivamente a monitorizar a los jugadores con malas conductas en el juego. Este "equipo de asalto" estará compuesto, principalmente, por diseñadores del juego y se encargarán de aplicar las sanciones adecuadas para cada uno de los casos. Según Kaplan, también van a empezar a apostar más por las expulsiones que por los silencios en los casos reincidentes.
Uno de los objetivos que quiere conseguir este equipo es conseguir automatizar la sanción de algunas conductas que se puedan prevenir. De esta forma, el juego, de manera autónoma, puede actuar sin la necesidad de tener a ningún técnico tras las pantallas.