Cuando un estudio, en este caso Bioware, tiene en su haber juegos como la saga 'Mass Effect', el que digan que 'Dragon Age Inquisition' ha sido su trabajo más duro deja bien a las claras el esfuerzo que ha llevado este proyecto. Tras una segunda parte vapuleada más por público que por crítica, seguro que este veterano estudio canadiense quiere resarcirse. Cameron Lee es el productor del juego, y no deja lugar a dudas acerca de situarlo como lo más ambicioso que han hecho:
"Sin duda lo es. Hemos tenido mucho tiempo para desarrollarlo, y obviamente eso ayuda. 'Dragon Age Inquisition' lleva gestándose cuatro años, y eso nos ha permitido poder encarar todos los desafíos que se nos han puesto por delante. El trabajo que ha hecho el equipo ha sido astronómico, pero tenemos gente realmente entusiasmada en cada parte del juego en que les ha tocado trabajar. Definitivamente sí, este juego es uno de los mayores desafíos a los que nos hemos enfrentado".
¿Limitaciones en la antigua generación?
'Dragon Age Inquisition' será el primer proyecto de Bioware en la nueva generación de consolas, pero también llegará a PlayStation 3 y Xbox 360. Lee no cree que esto limite ni el tamaño ni las posibilidades del RPG:
"La antigua generación no representa cuantas características puedes incluir en el juego, pero sí cómo las presentas. Cuando creas un título multigeneracional, la potencia de la nueva generación te da una idea de hasta dónde puedes llegar en temas técnicos. Además, tenemos una gran experienca en desarrollar para PC, con lo que sabemos cómo trabajar con tecnología superior e inferior".
'Dragon Age Inquisition' está siendo desarrollado por el estudio que Bioware tiene en la ciudad canadiense de Edmonton, e independietemente del resultado, lo que está claro es que han vuelto a crear hype en el jugador, ya que se encuentra ahora mismo el cuarto en la lista de los juegos más esperados en Amazon. Su fecha de lanzamiento es el 21 de noviembre.