El 25 de Junio 2018 | 09:33
La película de 'Billy Elliot' consiguió, en el año 2000, enamorar a partes iguales a la crítica y a los espectadores. No hubo quien se resistiera a la historia del joven Billy Elliot, un niño que descubrió que su vocación era bailar en una época en la que esto estaba poco menos que prohibido; los roles de género marcaban a la sociedad incluso más de lo que lo hacen ahora mismo, y bailar era considerado algo "de chicas". Que un chico bailara le catalogaba directamente como homosexual, y no había mayor deshonra que esa. Prueba de ello es la reacción de su familia al verle bailar, y todo lo que el protagonista del film tuvo que pasar para conseguir cumplir sus sueños.
En 2017, se estrenó en España el musical de la película. Con banda sonora de Elton John, este consiguió triunfar como ya lo hizo la película; la historia se mantuvo intacta, al igual que las ganas del público por verla. Poco a poco, este musical fue extendiéndose al resto de países europeos, entre los que se encuentra Hungría. El país, gobernado por Viktor Orban, ha sorprendido ahora al resto del mundo al haber cancelado las últimas quince funciones porque, al parecer, "podía convertir a los niños en homosexuales".
Homofobia, discriminación y malas noticias
Todo comenzó con una crítica realizada en el periódico Magyar Idök, que se acerca bastante a la ideología ultraconservadora del actual líder político de Hungría. La crítica señalaba que el musical podría convertir a los niños en homosexuales y, además, que haría infelices "a los jóvenes que, por ellos mismos, no irían en esa dirección".
En la crítica se puede ver constantemente una homofobia reflejada que nos habla de una sociedad a la que, por desgracia, aún le queda mucho por evolucionar. No dudaron en advertir de que "afecta al subconsciente de los menores, justo en una edad en la que todavía se puede influir sobre su inclinación", como si la sexualidad fuera algo que un factor externo puede cambiar, y no algo inherente al ser humano.
El director, Szilveszter Ókovács, ha sido el encargado de avisar a todos los actores y al equipo que se encontraba detrás de la obra de que esta había sido cancelada. Además, se ha visto obligado a dar un comunicado oficial informando de que todos aquellos que hubieran adquirido ya sus entradas tendrán de vuelta su dinero, sin ningún tipo de inconveniente. Aunque, en esta ocasión, hay muchas más cosas para preocuparse en esta noticia más allá de que se vaya a devolver el dinero de las entradas, como la homofobia latente que lleva a cancelar un musical como es el de 'Billy Elliot'. En España, este musical logró triunfar, conquistando a más de veinticinco mil espectadores e incluso logrando el premio al mejor musical del 2017.