Siempre que un juego exclusivo llega al catálogo, máxime con la expectación de una década de desarrollo, la actualidad del videojuego se detiene en un silencio incómodo tomando aire para desencadenar una auténtica batalla en foros, redes y revistas que se suele alargar semanas. Uno de estos casos, el último, es 'The Last Guardian', el nuevo juego de Fumito Ueda ('Ico' y 'Shadow of the Colossus') que acaba de llegar a PS4.
Es difícil cubrir las expectativas de un desarrollo que se ha dilatado durante toda una década. Muy difícil. Sin embargo, la particularidad de los desarrollos de Team Ico saben sobrevivir como pocos los tiempos y las modas. 'The Last Guardian' es un juego completamente reconocible en la trayectoria del estudio, lo que lo hace, a la vez, completamente diferente al resto del catálogo actual. Lo define Raúl Manero en el análisis escrito como un juego "único". Su particularidad juega a su favor en muchos sentido, pero uno de los más claros es que no se siente como un juego de hace una década en ninguno de sus aspectos, logrando mimetizarse a la perfección en el catálogo actual.
Diferente al resto
Su particularidad también le juega malas pasadas, y es que estamos ante un título de aventuras y puzles por momentos contemplativo, y centrado en crear una atmósfera de fantasía oriental muy determinada, lo que directamente lo aleja de una parte del público que exige a los videojuegos acción pura y dura. Una parte del público muy amplia.
No obstante, la conclusión de nuestro análisis, tanto escrito como en vídeo, es que este es un juego necesario para todo aquel que tenga una PS4 bajo su televisor.
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