Amazon ha comenzado su particular lucha por la motivación laboral con la transformación de sus almacenes en un videojuego. Mediante un proceso de "gamificación", el gigante del comercio electrónico quiere que el rendimiento de sus trabajadores mejore y la manera más idónea que se le ha ocurrido es ponerles a competir en diferentes juegos que luego les reportan unas recompensas que pueden canjear dentro de la misma tienda. Diversión son control, vaya.
Todo es mejor si es un juego
La llamada "gamificación" (convertir diferentes tareas en un juego con su recompensa) se está instaurando en cada vez más compañías con el fin de mantener un ambiente de trabajo sano y que ayude a los empleados a llevar su jornada de manera más amena y ligera. The Washington Post ha publicado un extenso texto en el que informa que Amazon ha adoptado también este método para aumentar la productividad en sus almacenes y que ya está en marcha en locales de Estados Unidos y también de Reino Unido.
El diario indica que la compañía de Jeff Bezos ha convertido algunos de sus depósitos en verdaderos patios de juego, ya que han transformado algunas de las tareas que tienen que hacer sus trabajadores en actividades que les otorgan puntos. De esta forma, llevarlas a cabo se les puede hacer más divertido o incluso menos pesado al pensar que se trata de un juego. Entre los que ha inventado Amazon los hay para un solo jugador, cooperativos y hasta competitivos y han dispuesto una serie de máquinas que se encargan de medir las puntuaciones. La compañía no castigará a quien no participe en estos juegos, pero sí que tendrá en cuenta caídas en el rendimiento.
La recompensa por participar (y obtener buena puntuación) en estas tareas "gamificadas" es una moneda propia que ha creado Amazon y que solo se puede canjear por productos que lleven el logo de Amazon. Es decir, productos propias de la compañía.