La familia de la empleada de Activision Blizzard, que se suicidó en el año 2017, ha demandado a la compañía de videojuegos por un caso de muerte por negligencia. Janet y Paul Moynihan, padres de una gerente financiero de Activision Blizzard de 32 años que se suicidó durante un viaje de negocios, alegan que el acoso sexual fue el factor determinante que la llevó a su muerte. Kerri Moynihan fue encontrada muerta en una habitación de hotel del Grand Californian Hotel & Spa de Disneyland en abril del año 2017 después de quitarse la vida.
Los padres de Kerri Moynihan alegan que Activision no actuó
El abogado que representa a Paul y Janet Moynihan ha proporcionado al medio digital El Washington Post una copia de la demanda. La demanda hace referencia al supuesto lugar de trabajo donde Kerri Moynihan desempeñaba su función, y lo califica de "hostil, intimidatorio, ofensivo y abusivo". Los padres de Kerri alegan que Activision Blizzard es responsable directa de la muerte de su hija puesto que no evitaron el acoso que la condujo al suicidio.
La demanda también alega que Moynihan sufrió varios casos de acoso sexual en el trabajo antes del viaje, incluido un incidente en el que se compartieron fotos de la vagina de Moynihan durante un evento festivo de la empresa. Anteriormente, ya se presentó una demanda con las mismas alegaciones, y entonces Activision Blizzard calificó a las acusaciones como "alegaciones distorsionadas y, en muchos casos, falsas".
Moynihan comenzó su andadura como empleada en Activision Blizzard en el año 2011 como contable. La demanda expone que ella antes había sido "una empleada apasionada y dedicada que trabajaba muchas horas y que sus colegas la querían mucho". En 2016, fue ascendida a gerente de finanzas apoyando las operaciones latinoamericanas de Activision Blizzard, según la demanda.
La demanda menciona a Greg Restituito como gerente de Moynihan y alega que Restituito mintió a los investigadores acerca de tener una relación sexual con Moynihan. Según la demanda, Activision Blizzard también se negó a entregar el portátil que Kerri utilizaba para trabajar a la policía y negó el acceso a los agentes del móvil del trabajo de Restituito.
En la demanda se hace referencia a un informe policial, que alega que Restituito hizo "investigaciones y preguntas inusualmente extrañas a otros empleados que estuvieron presentes la noche anterior al suicidio de Kerri", y también que fue al apartamento de ella "y lo limpió y extrajo artículos de él".