Las acciones de Sony han llegado a su punto más bajo en la Bolsa de Tokio en lo que son las peores cifras de los últimos 31 años del historial de la compañía. Esta noticia se junta con el anuncio reciente por parte de Sony declarando que habían perdido 5.710 millones de dólares este último año.
No están reaccionando correctamente
Sony y el recién nombrado presidente, Kaz Hirai, han pronosticado que volverán a tener beneficios en lo que queda de año fiscal, pero los analistas no creen que Sony sea capaz de reflotar un barco que se está hundiendo. Se dice que el nuevo presidente no está planteando una estrategia clara que haga frente a estos números.
El mes pasado Sony anunciaba "One Sony", un plan que revitalizaría la compañía, que se centraría en el mercado de los videojuegos para elevar sus ventas. Fuera de este sector se haría reestructuraciones y recortes entorno a la sección de televisores, e intentaría crear nuevos negocios así como optimizar sus recursos.