El 17 de Octubre 2017 | 12:10
Japón es un país de contrastes, algo que se aprecia nada más comprobar la dualidad existente entre lo moderno y lo ancestral, el futuro y el pasado. En lo social este contraste también existe, y esta escuela es prueba de ello.
Nichome, un área situada en el barrio de Shinjuku, Tokio, es conocida históricamente como el centro de la subcultura gay de Tokio, con infinididad de locales y actividades para que las parejas homosexuales y transexuales puedan disfrutar con total comodidad de karaokes, librerías, discotecas, restaurantes, pubs y otras más íntimas como el cruising. Allí abrirá las puertas próximamente un instituto revolucionario que ayudará a las personas transgénero a vivir con comodidad y orgullo, sin miedos, su identidad sexual.
Un local fundado por una celebridad
Este instituto, que ya ha sido bautizado como Otome Juku, tiene como prioridad máxima ayudar a que personas transgénero y transexuales nacidas en cuerpo de hombre puedan adquirir hábitos de comportamiento y desprendan un aura de mujer. Satsuki Nishihara es fundadora de la escuela, una reconocida figura transexual en el país.
La misma Nishihara asegura que su deseo es el de poder crear un lugar para ayudar a las personas a poder comprarse una falda o vestido como hacen las mujeres, y que no se sientan inseguras ni por ello ni por llevar puestas estas prendas.
Las primeras tres clases que se impartirán serán de feminización -actividades orientadas a adquirir expresiones, andares y gestos de mujer-, maquillaje -cómo poder maquillarse para realzar su belleza- y pronunciación -aprender a poner un tono de voz más suave mientras se habla-. A estas clases también podrán asistir las nacidas biológicamente como mujeres.
Cada sesión, que incluye las tres clases recién citadas, tiene un precio de 6.000 yenes -45 euros-. Existen bonos que ayudan a abaratar el coste de estas, como el pack de 5 sesiones por 29.000 yenes -219 euros-.
Las personas aficionadas al travestismo y los que sientan curiosidad por este mundo podrán participar en una sesión para vestirse como una mujer. Esta actividad tiene un precio de 9.000 yenes -68 euros-, y si se desea inmortalizar el momento con una sesión fotográfica el total asciende a 28.000 yenes -212 euros-.