'Stealth Inc' es, dentro del panorama independiente, lo más cercano a mezclar 'Metal Gear Solid' y 'Super Meat Boy'. Con el sigilo del primero, y la jugabilidad y el estilo gráfico del segundo, es una franquicia realmente diferente a lo habitual en el mercado. Compuesta, por otra parte, por hasta dos entregas en estos momentos (2018).
La primera, 'Stealth Bastard' es un videojuego en 2D desarrollado por los chicos de Curve Studios y publicado por Curve Digital, que llegó el pasado 2011, pero inicialmente en formato de juego gratuito para PC. En realidad, la versión extendida que muchos conocéis, llegó a Steam un año después, en 2012. Después también aterrizó en Linux y Mac, y lo hizo en 2013 junto al contenido descargable 'The Teleporter Chambers', que había llegado al mercado un mes antes. De todas formas, su recorrido no acabó ahí, ya que también está disponible para Android, donde llegó gracias a una interesante iniciativa de Humble Bundle. Ya un tiempo después, desembarcaría en consolas, en exclusiva para PlayStation (PS3 y PS Vita) y con el nombre por el que muchos conocen realmente la saga: 'Stealth Inc'. En este caso, con el subtítulo de 'A Clone in the Dark'.
Y si en tu caso te suena el nombre de 'Stealht Inc. Ultimate Edition', es porque probablemente has disfrutado de la versión de PS3, que es sin duda la más completa de todas. Entre otras cosas porque incluye tanto la expansión 'The Teleporter Chambers' que comentábamos antes, como la de 'The Lost Clones'.
En cuanto al propio juego, simplemente podemos decir que recibió críticas tremendamente positivas allá por donde pasó, con notas que superaban muy fácilmente el 80 sobre 100. También las ventas acompañaron, quizás por eso poco después tuvimos secuela.
En este caso, hablamos de 'Stealth Inc 2: Un juego de clones', que inicialmente fue anunciada para Wii U, en exclusiva, donde llegó en 2014. Aunque después también se lanzó en las demás plataformas importantes del momento, como PS3, PS4, PS Vita y, por primera vez, en Xbox One. Esto ya ocurrió en 2015.
Lo más interesante de todo con respecto a esta secuela es el hecho de que las novedades fueron muy notables. Por un lado, por las capacidades que ofrecía el Gamepad de Wii U, que fueron aprovechadas al máximo por parte de los desarrolladores; y por otro, porque añadió conceptos jugables muy novedosos con respecto al original, pero manteniendo la esencia.
Para ser más exactos, hablamos de la novedad que suponían esos clones que tanto rezaba el subtítulo de esta entrega. Nosotros podíamos controlarlos, y además de plataformas y sigilo, esta vez también había más puzles por resolver.
Otra historia es ya el editor de niveles que incluía, que merece un punto y aparte. De algún modo, expandió el contenido y la durabilidad del título de formas insospechadas, aunque seguramente no gozara de la misma popularidad que otros títulos independientes del momento. Eso sí, el uso tan curioso y divertido que hicieron los usuarios de WiiU con respecto al Miiverse sigue resultando destacable. Entre otras cosas, porque permitía que los usuarios publicaran mensajes en las paredes de la historia principal. Tan original como rompedor.
2014