En una época en la que la realización de títulos en mundos abiertos estaba casi en exclusiva en manos de Rockstar y su todopoderosa franquicia 'Grand Theft auto' Volition y THQ lanzaban al mercado 'Saints Row', un título que compartía con la franquicia de Rockstar varios elementos comunes más allá del desarrollarse en un entorno totalmente abierto y urbano.
La primera entrega, publicada en 2006, nos situaba como parte de los Third Street Saints, cuando los cuerpos de seguridad de Stilwater, la ciudad ficticia donde se desarrolla la trama, capturan al líder de los Saints y ofrecen un trato, eliminar al alcalde, para dejarlo en libertad.
Como uno de los integrantes del clan deberemos realizar diversos encargos y tareas para poder llevar a cabo una operación que pase por rescatar al líder del grupo y de paso acabar con todos aquellos que se han metido en problemas con los Saints, de ahí que podamos deambular por la ciudad y explorarla a nuestro antojo, siendo considerado por muchos como el primer sandbox de la generación Xbox 360 y PlayStation 3.
Su franquicia rival por entonces, 'Grand Theft auto', aún no había lanzado su cuarta entrega y el público tenía ganas de disfrutar de un sandbox del estilo, así que no tardaron en apoyar el lanzamiento de esta primera entrega, lo que permitió la publicación de una segunda desarrollada casi a la par que el lanzamiento del título original, con el que la trama mantiene nexos en común.
Para el lanzamiento de esta entrega 'Grand Theft Auto IV' acababa de llegar al mercado y, aunque sus ventas permitieron continuar con su éxito, para Volition quedó claro que dos sagas con mismos planteamientos compitiendo entre sí, cuando una de ellas llevaba tanto bagaje a su espalda, les podría salir caro, provocando un cambio radical en el futuro de la misma.
En 2011 llegaba 'Saints Row: The Third', y aunque mantenía el nexos en común con los anteriores títulos, en esta ocasión toda la trama y su planteamiento se ideó como parte de un desarrollo en el que el humor absurdo y las situaciones más disparatadas fuesen parte fundamental de la jugabilidad, de ahí que también se realice un cambio de la ciudad vista en las dos entregas previas y ahora los Saints sean reconocidos internacionalmente como un grupo delincuente a respetar por el resto de compañeros.
Desde las características de nuestro personaje hasta las misiones a desempeñar estaban impregnadas de un humor socarrón y absurdo llevado al máximo nivel, con situaciones inverosímiles y armas tan dispares como un consolador gigante que superó los dos millones de abatidos según datos oficiales del estudio.
Este giro en el planteamiento de la franquicia resultó efectivo, consiguiendo distanciarse de su rival y crear un estilo propio que continuó en ascenso con el lanzamiento de su cuarta y última entrega, en 2013. En ella volvíamos a ser testigos de todas las tramas descabelladas y armamentos dispares, pero los problemas de THQ, la principal responsable en su distribución y su posterior desaparición hicieron que la franquicia quedase en un limbo durante meses, hasta que Deep Silver y Koch Media adquirían el estudio y la licencia para continuar con ella en el futuro.
2015
2013
2011
2008