Rare, el estudio de desarrollo detrás de muchas de las conocidas franquicias de Nintendo como 'Perfect Dark' o 'Donkey Kong', lanzaba en 1994 un título de lucha bajo el nombre de 'Killer Instinct', un género en el que los creadores del también conocido 'Battletoads' nunca se habían adentrado, pero que les sirvió para demostrar que, a polivalentes, pocos estudios de la época podían competirle.
'No Mercy', 'Ultimate' o 'Ultras' son sólo algunas de las combinaciones con las que la franquicia, ya en su primera entrega, consiguió distanciarse de sus rivales más directos, como 'Street Fighter' o 'Mortal Kombat', aunque por ejemplo, de éste último, sí que tomaba inspiraciones en sus 'fatalities' para desarrollar las técnicas finales de cada luchador, aunque muchas de ellas eran accesibles a través de varios combos distintos.
Cada personaje contaba con habilidades propias y varios tipos de combos, desde los básicos a algunos más complejos que implicaban el uso de varios botones del mando de la recreativa o de la SNES, para la que fue lanzado en 1995. Precisamente a raíz de su lanzamiento en la plataforma de Nintendo la franquicia gozó de un gran éxito internacional, lo que aseguró el desarrollo de una segunda parte, lanzada en 1996.
Aunque esta segunda entrega mantenía todos los elementos positivos de la primera y algunas novedades, como los contra ataques después de iniciar combos, su éxito fue algo menor y supuso el final de la franquicia durante años. Rare se dedicó a continuar desarrollando proyectos en los que ya tenía experiencia y dejó de lado la saga de lucha a pesar de que muchos de los fans esperaban su regreso.
Cuando la compañía fue adquirida por Microsoft, ésta reactivó algunas de sus franquicias y 'Killer Instinct' estaba entre los deseos de los fans, pero no fue hasta 2013 cuando la propia Microsoft lanzaba al mercado, esta vez sin la colaboración de Rare, una nueva entrega de la franquicia denominada como 'Killer Instinct' para Xbox One, lo que suponía un reinicio casi al completo de la misma, manteniendo tan sólo los luchadores, con los que ahora podríamos disputar combates bajo el aspecto de un título pensado para distribuirse por temporadas.
La primera de estas temporadas estuvo en manos de Double Helix y fue muy criticada por ofrecer poco contenido para los jugadores de la franquicia, que inicialmente acogieron de buen grado la llegada de la saga tras más de 17 años desaparecida. Tras una primera temporada algo dudosa, Microsoft encargó el desarrollo de la segunda temporada a Iron Galaxy tras la adquisición por parte de Amazon de Double Helix. De esta forma, y hasta la fecha, es el estudio con sede en Chicago el que se encarga de la franquicia, habiendo desarrollado la segunda y tercera temporada del mismo.
Tras años como una exclusiva de Xbox One, esta última entrega de la saga se lanzó a finales de 2017 en Steam, el rival directo de Windows Store, y en el propio bazar de la compañía, dejando ver que además todas las versiones cuentan con juego cruzado entre ellas.
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