Esta obra de Infinity Ward es el inicio de una de las franquicias más importantes de la historia de los videojuegos y una de las más proliferas en factores económicos. El FPS ambientado en la Segunda Guerra Mundial que surgió como sucesor espiritual de 'Medal of Honor: Allied Assault' acabó sentando una nueva base para los juegos de disparos modernos que se alejaban de un factor puramente arcade como las obras que dominaron los años 80 y 90 para acabar asentando un tipo de experiencia más cinemática usando siempre como telón de fondo conflictos bélicos reales del pasado, el presente y en ocasiones usando la ficción para representar guerras del futuro. Con el paso de los años llegaron todo tipo de adaptaciones del juego a nuevos sistemas mientras que incontables nuevas entregas iban nutriendo la franquicia con éxitos de ventas año a año. El juego ganó el primer BAFTA a Juego del Año de la historia del galardón.