en los últimos años, los personajes de Mortadelo y filemón siempre han intentado criticar y satirizar sobre la actualidad España, al margen de las entregas dedicadas a eventos deportivos como los Mundiales de Fútbol y los Juegos Olímpicos. Así tenemos entregas como '¡Por Isis, llegó la crisis!' sobre la crisis financiera, 'Marrullería en la alcaldía' sobre la corrupción en puestos políticos, 'Jubilación... ¡a los noventa!' para criticar la subida de la edad de jubilación o 'El tesorero' dedicado al personaje de Luis Bárcenas. Con el más reciente número de 'Mortadelo y Filemón' que lleva de nombre 'Sueldecitos más bien bajitos...', critica la precariedad laboral que muchos españoles están sufriendo en sus carnes en la que tienen que tener numerosos trabajos precarios y con nula estabilidad para tratar de tener dinero para subsistir.
Ibañes, siempre a la crítica
Según podemos leer en El Mundo, en este nuevo número de 'Mortadelo y Filemón' podemos ver cómo a los agentes de la T.I.A les han bajado el salario a ocho euros la semana y tienen que buscarse otros trabajos para sobrevivir. La historia de este número se le ocurrió a Ibáñez "al buscar un tema que tuviera cierta continuidad en el tiempo, por aquello de alargar las ventas lo máximo posible. Es que entre que empiezo un libro, que tardo un par de meses, luego se colorea, que son dos meses más...así es difícil que un tema siga de actualidad cuando sale a la venta, cuatro meses después. Con el ex tesorero aquel pensé: este señor tendrá muchos juicios y dará juego durante años y no me equivoqué, porque el cómic sigue vendiendo. Y con el tema de los sueldos pues, desgraciadamente, es ideal porque la situación puede seguir años así. Lo político siempre ha salido en mis cómics como excusa, pero la intención nunca ha sido la crítica social. La esencia de Mortadelo y Filemón, de la historieta, es el gag. Lo importante es hacer reír a la gente y que pase un buen rato".
Para quien se pregunte cómo es que Francisco Ibáñez a sus casi ochenta años aún sigue sacando entregas de 'Mortadelo y Filemón' cada año, el dibujante declaró en la entrevista que es un adicto al trabajo y desea volver a tener 40 años para entregar 20 páginas a la semana.