El 3 de Septiembre 2018 | 07:17
En la primera parte de 'It', Andy Muschietti demostró que su adaptación al libro original de Stephen King, pese a ser distinta a la miniserie de Tommy Lee Wallace, era una gran adaptación. Hizo cambios con respecto al libro original, pero únicamente para conseguir mantener la atención del espectador durante la mayor parte de tiempo posible. Eso sí: hubo escenas míticas que faltaron, algo que buena parte del público no perdonó. Una de las que más se echó en falta fue la famosa escena de las duchas, protagonizada por Eddie.
Parece ser que el director podría querer resarcirse, porque en esta segunda parte ha introducido una escena que no habíamos visto hasta ahora en la primera adaptación. En la fotografía que se ha filtrado, se puede ver a Pennywise (interpretado por Bill Skarsgård) colgado en una estatua gigantesca de Paul Bunyan; en el libro, el payaso hacía esto para aterrorizar a Richie. Podríamos verle transformarse también en hombre lobo, para continuar con el terror, así como en la bruja de Hansel y Gretel; Pennywise era un personaje muy polifacético en el libro original, capaz de transformarse de forma instantánea en cualquier monstruo que supiera que iba a aterrorizar a su víctima.
Todo parece apuntar a que Bill Skarsgård continúa trabajando en el set de rodaje, pese a que hay actores que ya han terminado su trabajo, como Jessica Chastain. La actriz, que da vida a Beverly Marsh en su versión adulta, se despidió hace unos días de sus compañeros de trabajo; el primero en acabar, no obstante, fue Andy Bean (Stanley Uris), hace ya algunas semanas.
En esta segunda parte veremos a todos los protagonistas en su versión adulta, aunque también los veremos rememorar su pasado y recordar la última vez que tuvieron que hacer frente al payaso. Tendremos que esperar hasta el 6 de septiembre de 2019 para poder disfrutar de todas estas nuevas imágenes en el cine.
Más escenas míticas que podrían incluir
Hay grandes escenas que Muschietti podría haberse planteado incluir en esta ocasión, aunque hay otras que no deberían faltar en ninguno de los casos. Como, por ejemplo, la escena del restaurante chino, cuando todos los protagonistas se reúnen por primera vez tras veintisiete años sin verse. O la escena de la biblioteca, con un Pennywise que muestra incluso su temor al verlos regresar a Derry.
Es innegable que hay otras escenas que, pese a ser originales de Stephen King y transmitir por completo la esencia del autor, se consideran demasiado crudas como para ser mostradas en el cine. Ya queda menos para descubrir hasta qué punto ha decidido el director darle un lavado de cara a la película para que esta sea apta para la mayor cantidad de público posible. En septiembre del año que viene llegará a las salas españolas.