El 16 de Abril 2018 | 23:34
La franquicia 'Mad Max', de George Miller, se ve comprometida ante la batalla judicial entre el director y Warner Bros. Empezó con una denuncia por parte de Miller y su compañía de producción, Kennedy Miller Mitchell. 'Mad Max: Fury Road' ha conseguido más de quinientos millones de dólares en todo el mundo y distintos Oscars, pero parece que Warner Bros se "olvidó" de pagar cierta parte de las ganancias.
Eso ha desembocado en acusaciones contra Warner Bros por "actuar de forma insultante e irresponsable" y de "destruir su relación con Kennedy Miller Mitchell." Pero, como si esto no fuera suficiente, The Sydney Morning Herald ha obtenido nuevos documentos del juicio que detallan el conflicto entre las dos compañías.
Cada vez a más
Warner Bros acusa a su vez a su contrincante de romper la cláusula del contrato que incluía la duración y la clasificación originales. Afirma que Miller presentó una película de 120 minutos y con contenido para adultos cuando, en principio, no debía sobrepasar los 100 minutos ni ser para mayores de dieciséis años. Eso deriva, además, en otro conflicto acerca de rodar ciertas escenas en la Ciudadela de Immortan Joe. Warner Bros insistía a Miller que las eliminara. Y eso, a su vez, provoca más quejas por parte de la compañía de Miller, ya que "tomar una serie de decisiones" provocó cambios sustanciales y retrasos en la producción. ¿Os imagináis lo distinta que habría sido 'Fury Road' de haber seguido con el plan original?
Otra fuente de debate entre ambas compañías es la implicación de Ratpac-Dune Entertainment. Kennedy Miller Mitchell declara que Warner Bros pidió su cofinanciación cuando, según su contrato, debería haber acudido a Miller primero.
Este conflicto todavía tiene un largo camino por delante antes de resolverse, pero amenaza el futuro de todo 'Mad Max', que todavía tenía previstas dos películas para continuar con los eventos de 'Fury Road'. Entre ellas, una secuela centrada en la Furiosa de Charlize Theron.
¿Podría ser el final?