Charlie Cox no fue elegido para ser Han Solo por actuar como Daredevil

La saga de 'Star Wars' ha vuelto en pleno apogeo. A la séptima entrega estrenada el pasado diciembre, ya se han confirmado tres spin-off paralelos a la historia original. Una de estas películas será la que narre las aventuras de Han Solo, antes de que se involucrase en la trama de la cuarta, quinta y sexta entrega, según el orden de la historia.

Participar en algunas de estas nuevas entregas es una oportunidad que ningún actor de Hollywood quiere dejar pasar, sobre todo por la popularidad que pueden llegar a alcanzar. Reencarna al joven Han Solo, y ser comparado con el mismísimo Harrison Ford es una oportunidad tan grande, que muchos actores conocidos han peleado por coger el papel.

Uno de esos intérpretes de los que hablamos ha sido Charlie Cox, el popular actor que está interpretando a Matt Murdock en la serie original de Netflix 'Daredevil'.

Demasiada influencia del Demonio Rojo

En una entrevista que le han realizado a Charlie Cox en The Hollywood Reporter, el actor americano ha confesado que participó en las audiciones para conseguir el ansiado papel de Han Solo. Sin duda tenía cualidades, después de ver la gran interpretación que está realizando en una de la series que mejor acogida ha tenido del mundo Marvel. Pero quizás esta pasión por 'Daredevil' le jugó una mala pasada.

Según cuenta el actor americano, acudió al casting que él ha denominado "super secreto". Después de ver todo el hermetismo que tenía la audición, comprendió que se trataba del mencionado spin-off. Según narra Cox, a la mitad de su actuación, el director de la prueba le cortó y le preguntó por qué no le miraba a los ojos.

Como todos sabéis, el héroe de La Cocina del Infierno es ciego, y cuando representa al mítico abogado, Cox no puede mover los ojos. Se ve que esta influencia ha recalado en demasía en sus actuaciones, llevando ese perfil al resto de sus interpretaciones.

Después de la prueba, según cuenta Cox, no le volvieron a llamar de dicha prueba. Parece que su buen hacer con el Demonio Rojo le ha jugado una mala pasada.