Estimado Arturo Valls:
Me dirijo a ti personalmente en esta breve carta, aunque he de admitir que esto no va destinado únicamente hacia tu persona. Este texto tiene como fin transmitir una idea que, pese a haber repetido en multitud de ocasiones, tengo la sensación de que aún no he conseguido hacerla llegar en condiciones a la sociedad; ni yo, ni otras tantas autoras que, con muchos más conocimientos y mucha más experiencia que yo, han hablado sobre el tema.
No me sorprendió en absoluto ver que eras tú el que hacía estas declaraciones; no porque me parezcas una mala persona, ni mucho menos (no te conozco). Es que el humor que muestras en televisión ya deja entrever muy claramente cuál es tu opinión respecto a las diferentes luchas sociales, y cómo crees que deberían ser tanto los medios de comunicación como el cine. Un breve apunte: si el humor únicamente se usa para justificar opresiones, deberías revisarlo. Si solo haces chistes relacionados con las minorías, ridiculizándolas y menospreciándolas (todo bajo la excusa del humor, claro), lo que haces es continuar con estos mecanismos de opresión.
Mas comencemos por el principio. Supuestamente, los Goya este año han tenido un tinte reivindicativo a favor del feminismo; digo supuestamente porque las cifras no han mostrado esto, pese a que se hayan esforzado por hacernos creer que sí. Pero bueno, no voy a detenerme más en este asunto, puesto que me quedaría sin tiempo para analizar tu discursa. Ese toque reivindicativo a ti no te ha parecido bien, según has comentado. "Creo que no es una noche para reivindicar, se debería hablar más de cine y de lo que cuesta producir una película, no marear con otros temas", has señalado, muy desafortunadamente. Has dejado una lucha tan importante como el feminismo en un segundo plano, aislándola del cine, como si no tuviera nada que ver; como si el cine no fuera otra herramienta para luchar contra las desigualdades. Y no podrías haberte equivocado más.
El cine es un espacio para la crítica
Desde sus orígenes, tanto el cine como cualquier otro medio de comunicación y entretenimiento, se ha usado para hacer todas esas reivindicaciones que, de una forma menos velada, era imposible hacer. El teatro es un buen ejemplo de ello. Mediante la ficción, se pueden enmascarar las luchas sociales y presentarlas ante el público simplificadas; darle a descubrir a las personas que no tienen tiempo para estudiar grandes ensayos feministas una gran cantidad de información que, de otra forma, quizás nunca tuvieran la oportunidad de conocer. Las grandes ideas feministas (como el empoderamiento femenino, o esa lucha por la igualdad a la que aún algunos teméis tanto) se pueden convertir en algo muy sencillo de comprender gracias a medios como el cine.
Es por eso que el cine siempre debe ser un espacio de reivindicación y, cómo no, una gala tan importante como los Goya debe reflejar esto. No solo es importante saber "lo que cuesta hoy producir una película en España", que también, sino que es importante conocer que si eres una mujer y te quieres dedicar a la dirección cinematográfica, tus posibilidades de conseguirlo serán mucho más reducidas que si eres un hombre. Es fundamental saber que las actrices son sometidas a cánones de belleza mucho más duros y estrictos que los hombres; y si no me crees, no tienes más que echar un vistazo al elenco de una de las series españolas con mayor audiencia del momento, 'La que se avecina'. ¿Comparamos físicamente a Antonio Recio con Judith? ¿O con Berta? ¿O a Enrique con Raquel? Podría continuar, pero creo que has captado la idea.
Los Goya deben servir para mostrar todo esto. Para hablar de las realidades que afectan diariamente a las actrices, puesto que estas también forman parte de la industria cinematográfica, así como las directoras, las guionistas y todas las mujeres que forman parte del equipo técnico. Porque, aunque no lo creas, continúan teniendo muchas menos oportunidades que tú únicamente por ser mujeres.
El cine es un espacio que se presta a la reivindicación, que siempre lo ha hecho y siempre lo hará. Porque aunque haya gente que, como tú, cree que se debería separar la ficción de la realidad, no debemos olvidar jamás que la ficción es una forma de socializar como otra cualquiera. A través del cine, y de la televisión (algo que te será mucho más cercano, sin lugar a dudas) las personas vamos conociendo la sociedad que nos rodea; la televisión bebe de la sociedad, sí, pero también la sociedad bebe de ella.
Así que, estimado Arturo, "marear con otros temas" es muy importante tanto en los Goya como en cualquier otro espacio público. Porque la lucha feminista no busca "marearte", sino conseguir que nosotras tengamos las mismas oportunidades que vosotros.