James Wan se encuentra ahora mismo rodando 'Aquaman' en Australia con Jason Momoa como protagonista. Está claro que una película tan centrada en la vida submarina debe de ser muy complicada de grabar, pero su director lo confirma por si había dudas.
Rodar bajo el agua
"Técnicamente, es muy desafiante de grabar. Trabajar con agua e incluso las secuencias que se ruedan en seco y después son húmedas son muy complejas. Nuestro equivalente de dos personas sentadas charlando en el mundo submarino es súper complicado. Tienes que pensar en el CGI del pelo, cómo se mueven las ropas, cómo flotan, qué tipo de aparejos debemos utilizar y esas cosas".
Wan es consciente que toda esta complicación es porque está comprometido a rodar todo lo posible con actores reales y dejar los efectos digitales para cuando sea estrictamente necesario. "Eso lo hace muy difícil y quita muchísimo tiempo. No es una decisión fácil, pero espero que al final compense", asegura el director.
Hace un par de meses pudimos ver a Dolph Lundgren ensayando una escena como el rey Nereus. Wan explica que contrató a la estrella de acción gracias a un amigo suyo, el director Mike Mendez, quien estaba trabajando con él y le habló maravillas sobre él.