El 4 de Marzo 2020 | 20:42
El coronavirus no sólo está provocando que se cancelen eventos y se aplacen rodajes en países afectados, sino que ya se ha cobrado la primera víctima importante en el cine. MGM ha anunciado que la nueva película de James Bond, 'Sin tiempo para morir', se estrenará en noviembre de 2020, y no en abril tal y como estaba previsto hasta hace unos días. Según la información publicada, la nueva fecha para Reino Unido será el 12 de noviembre, mientras que a los mercados internacionales llegará el 25 de noviembre (todavía no se sabe cuál será la fecha elegida para España).
El miedo y la precaución se está apoderando de Hollywood después de que países como China, Corea del Sur o Japón hayan cerrado sus cines, más aún cuando estamos hablando de películas como 'Sin tiempo para morir', cuyo presupuesto ha sido de 200$ millones, más el coste todavía por determinar del marketing. Este aspecto también ha sido una cuestión importante que tener en cuenta en esta "cuidadosa consideración y exhaustiva evaluación del mercado del cine global", ya que la maquinaría de la promoción comenzó hace unas semanas, cuando se empezaron a lanzar las primeras portadas de las revistas especializadas y sesiones fotográficos de sus actores protagonistas.
MGM, Universal and Bond producers, Michael G. Wilson and Barbara Broccoli, announced today that after careful consideration and thorough evaluation of the global theatrical marketplace, the release of NO TIME TO DIE will be postponed until November 2020. pic.twitter.com/a9h1RP5OKd
— James Bond (@007) March 4, 2020
'Mulan', otra víctima del coronavirus
Probablemente, 'Sin tiempo para morir' será sólo la primera película de otras tantas que decidirán también retrasar sus estrenos con la esperanza de que la situación mundial se calme y los cines vuelvan a abrirse. Una de las mayores perjudicadas es 'Mulan', el remake de Disney que tenía como uno de sus principales objetivos el mercado chino. Un representante de la compañía ha confirmado a Variety que la fecha de Estados Unidos no ha cambiado, pero sí que lo ha hecho en ciertos mercados internacionales (todavía sin especificar cuáles).
