El 24 de Diciembre 2015 | 10:14
'This War Of Mine' se convirtió en una de las sorpresas indie de 2014, pero su presencia se limitó al terreno del PC, donde cosechó multitud de premios y galardones. El próximo 29 de enero esta experiencia llega a PlayStation 4 y Xbox One bajo el nombre 'This War of Mine: The Little Ones' e incorpora algunas novedades bajo el brazo.
La fórmula base del juego permanece sin alteraciones en esta nueva versión. Nos vemos transportados a la guerra, pero no desde el punto de vista de la épica militar, sino desde la desalentadora perspectiva de la población civil que lucha por sobrevivir a cualquier precio. Las penurias, la falta de recursos, el cansancio o el hambre serán constantes con las que los diferentes personajes deberán convivir día tras día.
Por supuesto, un juego no consigue tanto premios como 'This War of Mine' basando todas sus cartas en el hacernos pasarlo mal. La estrategia, el sigilo y la supervivencia son los tres pilares fundamentales sobre los que se erige el juego, creando un conjunto solvente capaz de enganchar a cualquiera que esté dispuesto a dedicarle tiempo. Deberemos ir dando ordenes a los personajes que se han refugiado con nosotros para hacer que sobrevivan un día más, recuperando materiales, construyendo objetos útiles y cubriendo lo mejor posible sus necesidades básicas. Al caer la noche podremos explorar las zonas cercanas, donde podemos encontrar grandes recompensas y peligros que eviten que nuestro avatar llegue vivo a casa.
La guerra es desagradable en This War of Mine
La lucha contra estas variables comporta hacer sacrificios y realizar acciones "de dudosa moral" que pesarán sobre nuestra conciencia y la del personaje que haya ejecutado. Ejemplo real: tras varios días al borde de la muerte, uno de mis personajes encuentra una casa donde se refugia una pareja anciana enferma. La casa está llena de víveres, pero quitárselos supone condenarles a muerte. ¿Qué hacer?
Mi decisión pasó por evitar mi propia muerte y llevármelos. La reacción de la pareja no fue pacífica y terminaron pereciendo bajo los golpes que les propinó mi personaje para defenderse. La vuelta a la casa no fue precisamente agradable, puesto que el resto de habitantes de la misma no paraban de soltar comentarios desagradables sobre lo sucedido. Como resultado, los habitantes de mi refugio cayeron en depresión por lo que terminé pagando un precio muy alto a cambio de unas pocas herramientas y víveres.
El añadido más grande a 'This War of Mine: The Little Ones' llega en este momento, porque ahora podremos cuidar de niños indefensos que acudan a nosotros. No solamente deberemos cuidar de nosotros mismos sino de unos críos desprotegidos ante los envites de los combates. Deberemos proporcionarles juguetes y diversiones, además de necesitar también de medicinas y comida. Ante la escasez de recursos proteger a los más indefensos promete convertirse en un auténtico drama.
La adaptación del control a las consolas de nueva generación responde sorprendentemente bien, resultando ágil en todo momento y sin llegar a echar de menos el combo de teclado y ratón de la versión original. Sin embargo, he encontrado un punto especialmente doloroso de manejar: las escaleras. Algo tan básico como subir y bajar escaleras puede convertirse en un prueba y error continuo hasta conseguirlo, un detalle que espero sea producto del actual estado beta de 'This War of Mine: The Little Ones'.
Mención especial merece el sonido, que le otorga el valor añadido necesario a la ambientación para que consiga despegar. Los efectos de las pisadas, las balas lejanas, explosiones o el zumbido de la radio nos transportan a un conflicto con reminescencias del Kosovo de los 90, terminando por convertir la experiencia en algo no apto para los más sensibles.
Ser un indie reconocido no lo es todo en este mundillo y quizás su adaptación a las consolas de sobremesa llega demasiado tarde. Tengamos en cuenta que el juego sale a la venta el 29 de enero de 2016, casi dos años después que en compatibles y con una versión para Android e iOS que lleva pululando una temporada. El grueso de los interesados en esta experiencia ya la han vivido y quizás el mercado que le queda disponible a este juego en esta nueva etapa pueda antojarse escaso.