Este artículo contiene spoilers de 'The Flash' T3.
El quinto capítulo de 'The Flash' es un episodio de transición. El ritmo de las primeras semanas nos mal acostumbró, y era obvio que antes o después teníamos que volver a un progreso estable de la serie de The CW que, recordad, tiene temporadas de más de veinte episodios. Sin ser un capítulo lento, lo que hemos visto esta semana son tramas que se abren y otras que poco a poco avanzan, así como hemos podido profundizar en algunos personajes.
Quizá lo peor del episodio es que seguimos enredados e intrigados con el retornado Wells. Mantiene la actitud lunática y la firme intención de quedarse en la realidad de nuestros personajes, pero, de nuevo, la mirada torcida en el rabillo del ojo, su constante vigilancia, su rostro, para qué engañarnos, nos hace a todos sospechar, tanto espectadores como protagonistas. Ha vuelto convertido en un personaje divertido que logra sacar de sus casillas a Cisco, y eso siempre está bien, pero sigue aletargado esperando el mejor momento para destapar las que son sus verdaderas cartas.
Dejando el tema de H. Wells a la espera, la trama que sí se está abriendo es la de Caitlin Snow. Los poderes de Caitlin cada vez son más patentes, y la que será Killer Frost mantiene todavía su identidad en secreto para el resto de compañeros en S.T.A.R. Labs. Sin embargo, ha acudido a su madre para que la ayude, y descubrimos así parte del pasado de la inmaculada Snow.
Caitlin ha sufrido mucho en la serie, primero con la muerte de su marido, luego con la traición del doctor, y parece que estos no fueron más que un par de ejemplos recientes en una vida desdichada. Snow vio morir a su padre muy joven, y la indiferencia de su madre le obligó a superar la situación sin prácticamente ningún apoyo. Ahí se enfriaron las relaciones con su madre, que años después se mantiene todavía fría y distante. Caitlin acude a su laboratorio, uno de los tecnológicamente más avanzados del país, y el diagnóstico de su madre es el que ya conocíamos de antemano: no hay cura. Evidentemente Caitlin es una metahumana, no hay marcha atrás. Una muy poderosa, además.
El secreto de Caitlin
Lo que se nos avecina en esta temporada es el descubrimiento de los poderes de Caitlin, que tiene también un carácter renovado. Siempre ha sido el estabilizador del grupo, siempre servicial. Incluso en Flashpoint, 3x01, donde todos los personajes terminaron entrando en conflicto, ella se mantenía como ese elemento estabilizador. Sin embargo, cuando sus ojos se tiñen de blanco polar, despierta una parte de ella que hasta ahora no habíamos visto. Esto dará mucho juego, pero me imagino, por la conversación que Barry mantuvo con Julian recordando cómo un metahumano tiene que aceptar su situación, que ahora con Caitlin veremos una larguísima transición hasta que finalmente se descubra y acepte como Killer Frost.
El otro punto de avance en el capítulo viene justo con la relación entre Barry y Julian. Hemos conocido el oscuro secreto de Julian, nada sorprendente, y es que tras la prepotencia que muestra en el laboratorio se esconde un hombre inseguro y frustrado por no haberse convertido en metahumano tras el accidente. Hay un mensaje muy interesante al final del episodio, que en España puede pasar desapercibido, pero que en la sociedad americana tiene todo el sentido. 'The Flash' 3x05 arroja un mensaje abiertamente contrario al uso de armas entre civiles, un problema de primer orden en norteamérica, cuando Flash evita que Julian mate por error a un adolescente. Al impedir que Julian se tome la justicia por su mano el fin es doble: Barry logra que el forense comience a ver con buenos ojos a Flash, y a la sociedad la serie está mandado un mensaje muy claro que Charlton Heston no hubiese aprobado.
Se firma así un capítulo de relax, pero también muy profundo. Hemos descubierto cosas realmente interesantes de algunos personajes, y las tramas que se están abriendo en la tercera temporada prometen.
Nos leemos en el 3x06. La semana que viene, recordad, no hay episodio de 'The Flash'.